Charlotte de Cambridge se convierte en la protagonista de los Juegos de la Commonwealth
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Charlotte de Cambridge se ha convertido en la gran protagonista de esta jornada de martes al acudir junto a sus padres, el príncipe Guillermo y Kate Middleton a los Juegos de la Commonwealth. Se trata de un evento multideportivo que se celebra cada cuatro años y que enfrenta en diferentes disciplinas a deportistas de todos los países que conforman la Mancomunidad de Naciones.
Hasta Birmingham se han desplazado los duques de Cambridge junto a su hija para ver una competición de natación. De esta manera, la nieta del príncipe Carlos, de 7 años de edad, ha podido disfrutar de las pruebas que han tenido lugar en la piscina cubierta del centro acuático Sandwell.
Durante esta reaparición pública, la Princesa se ha mostrado de lo más emocionada y ha dejado imágenes derrochando complicidad junto a sus padres. Tal y como se ha podido ver en las fotografías se ha podido captar el momento en el que hace un gesto con el pulgar hacia arriba, señal con la que ha confirmado lo bien que se lo ha pasado.
Ha lucido para la especial ocasión un vestido sin mangas negro con un estampado de rayas blancas y como peinado unas trenzas. En cuando a la duquesa de Cambridge, esta vez, ha apostado por un traje de dos piezas formado por una blazer y un pantalón en color blanco. A su vez, ha incorporado a este estilismo una camiseta blanca. En cuanto al peinado, la esposa del Príncipe ha llevado su larga melena con unas ondas de lo más sofisticadas.
Charlotte de Cambridge, también se ha fijado en los selfies que se ha hecho su padre, quien posaba de lo más sonriente ante el objetivo de la cámara junto a dos aficionadas. Desde la grada se ha podido ver a la sobrina del príncipe Harry con un gesto serio mientras ocurría esta escena. Si bien ha sido ella quien ha acaparado toda la atención de los reporteros gráficos, hace tan solo unas semanas su hermano, Louis se colocaba en el foco de todas las miradas. Ocurrió en los actos con motivo del Jubileo de Platino de la Reina Isabel II, donde el pequeño llamó la atención por las graciosas caras que ponía mientras Kate Middleton intentaba que el nieto de la soberana dejara de hacerlas para así evitar romper con el protocolo real.
A esta cita también han acudido la familia Wessex. El príncipe Eduardo, su mujer Sophie y su hija Louise, han estado sentados justo detrás de los duques de Cambridge. Sin duda, un encuentro familiar en el que han intentado inculcar a la Princesa el valor del deporte.