Azul noche, zafiros y brillantes: La Reina Letizia, paradigma de la sofisticación en Barcelona

Cierre de agenda para los Reyes en una semana muy especial, marcada por el cumpleaños de la Princesa de Asturias y de la Reina Sofía. Sus Majestades se han trasladado este viernes hasta la Ciudad Condal para presidir el acto central con motivo del 175 aniversario de la Fundación Círculo del Liceo.

El Círculo del Liceo es un club privado, de estilo inglés, con un patrimonio artístico único y con cerca de un millar de socios que ofrece una serie de elegantes salones, sala de conferencias, biblioteca, restaurante y muchos otros servicios en un edificio emblemático de la ciudad de Barcelona que comparte con el Gran Teatre del Liceu, inaugurado en 1847.

Para esta cita, en la que el dress code marcaba traje largo a las mujeres y smoking para los hombres, la Reina ha apostado por el que se ha convertido últimamente en uno de sus colores fetiche, el azul marino. Un tono discreto y elegante que a la esposa de Felipe VI le sienta fenomenal y que, además, es el color de referencia del Principado de Asturias y, por tanto, de su hija mayor, la princesa Leonor.

La Reina ha sorprendido al recuperar de su armario un sofisticado vestido con escote asimétrico y cuerpo drapeado que estrenó en una de las cenas a las que Sus Majestades asistieron durante su viaje de Estado al Reino Unido en el verano de 2017. Un sofisticado modelo de Carolina Herrera que resaltaba la excepcional silueta de doña Letizia y con el que ha desafiado con maestría a las bajas temperaturas propias del mes de noviembre.

Lo ha combinado con zapatos y clutch en tonos metalizados, muy de tendencia. Como joyas, ha apostado por los zafiros, tanto en los pendientes -procedentes del joyero de doña Sofía-, como en la pulsera que ha llevado en la mano derecha, y que ya le vimos en la entrega de las Medallas al Mérito Civil del año 2019. Como era de esperar, no ha faltado su inseparable sortija dorada de Karen Hallam.

A nivel estilístico, esta semana ha sido peculiar para la Reina. El miércoles, doña Letizia sorprendía en Tudela estrenando una falda de la colección de Toga Archives para H&M que ha generado todo tipo de reacciones, ya que la esposa de Felipe VI no se puso la prenda como inicialmente estaba concebida. Un día después, en un almuerzo en el Palacio Real, Su Majestad apostó por un romántico vestido de Carolina Herrera que un año antes había estrenado su hija menor, la Infanta Sofía.

Este ha sido el último acto oficial de don Felipe y doña Letizia esta semana, apenas unos días antes de que la Princesa Leonor ponga punto final a sus vacaciones en España. La heredera ha estado en casa desde el pasado jueves día 27 de octubre, cuando reaparecía en Oviedo para participar en varios de los actos con motivo de la entrega de los Premios Princesa de Asturias. Han sido días cargados de emociones, pero también de contratiempos, como la gastroenteritis que truncó la visita de Leonor y de su hermana al Pueblo Ejemplar de Cadavedo el pasado sábado. Desde entonces no se ha vuelto a ver en público ni a la Princesa ni a su hermana, la Infanta Sofía.

La próxima semana se presenta un tanto atípica para la Familia Real. Aunque en el caso de don Felipe retomará sus actividades con cobertura por parte de los medios el jueves con una audiencia en el Palacio de la Zarzuela por la mañana y una cena en Palma de Mallorca por la tarde, a doña Letizia no la veremos hasta el viernes, cuando los Reyes presidan juntos en Almería el Acto de entrega de la XXXV edición de los Premios Macael.