Sandra Barneda y Nagore Robles toman una decisión crucial en su relación
han decidido dar un paso más y poner el broche de oro a su historia de amor
Hace solo un mes Sandra Barneda reconocía estar «viviendo la vida» junto a su pareja, Nagore Robles. Llevan juntas 4 años y han sobrevivido a varias rupturas, pero el amor que se tienen está por encima de todo y su historia está más que consolidada. Tanto, que han decidido dar un paso más tomando una decisión crucial en su relación. Según publica en exclusiva la revista Diez Minutos, la pareja ha iniciado el proceso para convertirse en madres. Al parecer Sandra y Nagore tomaron esta decisión durante la pandemia después de haberlo meditado en profundidad, por lo que tomaron la iniciativa de acudir a una clínica especializada en fertilidad para empezar con los preparativos.
Tras cuatro años juntas, han dado un paso crucial en su relación/Gtres
Fue en abril cuando la pareja se puso en manos de los profesionales de la Clínica IVI de Barcelona, la ciudad natal de la periodista, y siguiendo los consejos de los especialistas, acordaron que sería Sandra quien donara sus óvulos y, tras fecundarlos con la técnica in vitro, sería Nagore quien geste al embrión. Según la información de la revista, el primer paso ya se ha llevado a cabo: Barneda se sometió a un tratamiento hormonal para madurar sus folículos y, tras su extracción mediante punción ovárica, su óvulos ya han sido fecundados gracias a un donante anónimo que es inmunológicamente compatible con la madre gestante. Por el momento los embriones han sido congelados a la espera del momento idóneo para ser transferidos al útero de Nagore. Desde LOOK hemos intentado ponernos en contacto en dos ocasiones con Sandra Barneda sin éxito.
El proceso para convertirse en madres comenzó en abril/Gtres
Fue en junio de 2017 cuando la catalana hizo oficial su relación con Nagore Robles después de meses de rumores que ninguna de las dos confirmaba ni tampoco desmentía. La polifacética comunicadora recogía el Premio Triángulo Visibilidad 2017 que entrega COGAM, el colectivo LGTB de Madrid, y dedicó el galardón a su hermana mayor y a su pareja «con la que comparto mi vida». Hacía solo 3 años que la presentadora había hablado abiertamente de su condición sexual en ‘Hable con ellas’, donde ejercía de presentadora junto a otras compañeras, entre ellas Rocío Carrasco.
«La condición sexual no debe ser usada como arma arrojadiza, ni tampoco como alabanza o mérito personal. Por eso, hoy más que nunca y después de tantos años, basta ya de armarios, de etiquetas, de juzgar a las mujeres y a los hombres. Existen tantos caminos como personas que se aman», dijo en aquel momento. Pero una cosa fue hablar abiertamente de su homosexualidad y otra hacer alarde de su relación con Nagore. Son discretas y solo quieren que se las reconozca por sus respectivos trabajos, pero no se esconden.
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Han sido muchas las veces en las que las dos han coincidido en un plató de televisión, de hecho su amor surgió cuando Sandra presentaba ‘El Debate’ de los domingos de la cuarta edición de ‘GH VIIP’ y Nagore ejercía de colaboradora. La química entre ellas traspasaba la pantalla a pesar de que las dos trataban de desviar la atención hacia el hilo conductor del programa. «Enamorarme de ella es lo más fuerte que me ha pasado», reconocía Sandra sin poder evitar las lágrimas durante su participación en ‘Planeta Calleja’.
Las redes sociales han sido, y siguen siendo, la ventana a través de la cual comparten con sus seguidores cómo es su relación. Gracias a sus perfiles supimos que estaban mejor que nunca tras su último parón de cuatro meses, y también supimos que la vasca había viajado a República Dominicana para estar con su chica, durante las grabaciones de ‘La Isla de las Tentaciones’. Sus posts llevan siempre el hastag #Dragongirl, algo que comenzó Nagore al inicio de su relación cuando aún era secreta. Ella misma explicó en el programa de radio ‘Morning Glory’ que era el mote elegido por un amigo de la pareja que tienen en común. «Me lo puso porque tengo un dragón en mi interior que muchas veces me cuesta calmar e intento dormirlo».