Todo sobre la noche de los Grammy en la que Beyonce ha hecho historia
Las mujeres triunfaron en la 63 edición de los premios de la música
Después de los Globos de Oro divididos entre Los Ángeles y Nueva York, y los Premios Goya en España, ha sido el turno de la 63 edición de los Grammy. Una nueva gala, marcada por la pandemia donde ha llamado la atención la ausencia de mascarillas en la breve alfombra roja. Ha sido un año muy complicado para la industria musical, y la gala ha ido acorde a los tiempos que corren: sencilla, sin público, con actuaciones en un escenario circular situado en el Centro de Convenciones de Los Ángeles. No ha sido una celebración como las de antaño, apostando por lo majestuoso y el espectáculo. En este 2021 los organizadores han querido cederle todo el protagonismo, como no podía ser menos, a la música. Casi cuatro horas de gala donde había dos grandes favoritas, Beyonce y Taylor Swift, que no han defraudado en las quinielas. Aunque por allí también desfilaron Dua Lipa, Billi Eilish, Cardi B o Harry Styles.
Escenario circular y una gala sin público, así ha sido la ceremonia de entrega de los Grammy/Gtres
Beyonce hizo historia. Y no solo porque no pasó por la alfombra roja. La cantante texana se convirtió en la artista más galardonada de los Grammy con 28 gramófonos conquistados a lo largo de su larguísima carrera. «Llevo trabajando desde los 9 años en la música y no me lo puedo creer», aseguró en su discurso. En esta edición han sido 4 los galardones que se ha llevado a su vitrina: mejor canción rap, mejor actuación rap, mejor actuación R&B y mejor vídeo musical. Y eso que hace cinco años que no saca disco. Pero este año su gran baza era una banda sonora cuyo tema principal aborda el racismo en Estados Unidos.
Beyonce, una de las pocas artistas que no pasó por la alfombra roja y lució mascarilla y guantes/Gtres
La noche fue claramente de las mujeres. Al igual que su compañera, Taylor Swift también partía como favorita, y tampoco defraudó. Mientras que la exintegrante de ‘Destiny’s Child’ marcaba un hito histórico, Swift se confirmaba como una de las artistas más influyentes de la historia al ganar el Grammy al mejor disco del año por ‘Folklore’. Es la tercera vez que triunfa en la ‘categoría reina’ de los galardones. Ya lo hizo en 2010 con ‘Fearless’ y en 2016 con ‘1989’.
Al igual que Beyonce, Taylor Swift también ha hecho historia/Gtres
‘Folklore’ se publicó por sorpresa. Lo compuso y lo grabó durante el confinamiento. Se trata de 16 temas que mezclan estilos tan dispares como el folk, el indie, el country y el pop. Sin duda, el coronavirus hizo que brotara la inspiración de la polifacética cantante, que tras el lanzamiento del disco aseguró en sus redes sociales que no podía dejar de componer.
Alfombra roja
No hay entrega de premios que se precie sin una alfombra roja donde artistas, nominados e invitados lucen sus mejores galas para la ocasión. Pero en los Grammy no hay término medio. Hay outfits perfectos y otros dignos de llamar a un buen estilista. Y en esta ocasión, a pesar de la brevedad de la misma, también hubo de todo. Estilazo, glamour y grandes diseñadores y varios patinazos.
Dua Lipa, una de las mejor vestidas con este Versace joya/Gtres.
Entre las mejor vestidas están Taylor Swift, con un minivestido de flores de Óscar de la Renta con sandalias en rosa empolvado y un peinado romántico a la altura del look elegido. Dua Lipa fue una de las que eligió el largo con un espectacular Versace de red, con pedrería y cuerpo con detalle de mariposa. Mientras que Ingrid Andress fue de las pocas que apostó por los pantalones con un esmoquin blanco de Armani Privé y top joya que recordaba al look que llevó Natalia de Molina en los Goya.
Billie Eilish desacertada a pesar de llevar un Gucci/Gtres
Como peores vestidas destacan Billie Eilish con un Gucci que conjuntaba mascarilla, gorra y esmalte de uñas. Un look que casaría más bien con la noche de Halloween al igual que el de Phoebe Bridgers que escogió un vestido esqueleto firmado por Tom Browne. Y a falta de Lady Gaga, Noah Cyrus. La hermana pequeña de Miley puso el toque excéntrico sobre la alfombra roja con un diseño de Schiaparelli Couture, el mismo diseñador que vistió a Beyonce.