Mario Casas debuta como director y cuenta con un protagonista de lo más especial
Mario Casas se ha convertido ya en un actor de renombre. Aunque su andadura en la interpretación comenzó mucho antes, no fue hasta 2006 que su nombre comenzó a sonar con fuerza, tras lograr un personaje fijo en la serie juvenil SMS y debutar en el cine de la mano de Antonio Banderas con el filme El camino de los ingleses. Sin embargo, el salto a la fama lo dio con su participación en Los hombres de Paco y su papel como H en Tres metros sobre el cielo, donde consiguió conquistar el corazón de todas las adolescentes. A partir de ese momento, consiguió hacerse un gran hueco en la gran pantalla y pasar a formar parte de los actores más aclamados de la industria. Sin embargo, su ambición por crecer ha ido un paso más allá.
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Fue el pasado 2020 cuando el de La Coruña desveló que siempre había querido estar detrás de las cámaras, siendo para él un sueño probar suerte como director. “Me gustaría dirigir. Durante el confinamiento he estado escribiendo y sacando ideas”, confesó por aquel entonces. Ahora, dos años después, su carrera ha dado un giro de 180 grados, pues el que actor debutará como director con la ficción Mi soledad tiene alas, cumpliendo además otro de sus sueños: que su hermano Óscar sea el protagonista de su nueva aventura. “El mundo se paró y sentí la necesidad de hacer algo con mi vida. Así que empecé a escribir con la guionista Deborah François”, ha confesado a la revista ICON, dando un hueco en su relato a la que un día fue su novia.
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El intérprete de No matarás ha desvelado que las primeras grabaciones de la película comenzarán el próximo mes de octubre, teniendo como principal escenario Barcelona, pues pretende retratar su propia infancia en la ciudad, acercando a la pantalla la vida en zonas como Martorell o Esparraguera, donde él se crió. Para ello, ha querido contar con actores que no se dediquen a la interpretación de manera profesional, con el objetivo de darle naturalidad a la ficción que tiene como trama seguir a unos jóvenes “que viven sin miedo y que se dedican a dar palos en joyerías hasta que tienen que huir a una barriada madrileña”.
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Un gran cambio en la trayectoria profesional de Mario, que hasta ahora solo ha estado centrado en su faceta como actor. Una nueva aventura en la que contará con uno de sus pilares fundamentales, su hermano Óscar, que dará vida a un joven que “expresa su mundo a través del grafiti. Es un chaval con mucha sensibilidad, el personaje que me hubiera gustado hacer con su edad”. Por su parte, el mediano de los Casas ha mostrado estar muy ilusionado con este proyecto, además de agradecido con su hermano por la oportunidad. “Mario confía en mí más que yo mismo”, ha confesado en el reportaje de ICON, donde han demostrado estar muy unidos.