Lo que no se vio de la alfombra de los Goya: aceitunas a Richard Gere y ‘espantá’ de Bernardeau

La 39ª edición de los premios Goya en Granada fue una noche de elegancia y emoción, con la alfombra roja como centro de atención de un desfile lleno de glamour. Con un protocolo meticulosamente planeado, los nominados comenzaron a llegar al Palacio de Congresos en autobuses, partiendo desde sus hoteles hacia el Paseo del Violón, una zona cercana al lugar del evento. El primer grupo llegó alrededor de las 17:30 horas, accediendo directamente a una explanada donde podían dejar sus abrigos y pertenencias en unas casetas, antes de empezar a desfilar por la alfombra roja, luciendo sus trajes y vestidos.

La llegada de los actores y actrices

Desde la explanada, los nominados fueron trasladados en coches oficiales hasta el inicio de la alfombra roja, ubicada cerca de las escalinatas del Palacio. Este recorrido, de unos 200 metros, los condujo hasta la esquina donde se encontraban las escaleras, marcando el comienzo del desfile. Frente a estas se habilitó una grada para la prensa y 250 invitados seleccionados por la Academia, quienes fueron los afortunados de presenciar el evento en vivo. Aunque el área estaba delimitada, el público general también pudo disfrutar del espectáculo desde zonas cercanas, aunque a distancia. Quizás demasiada.

Tras esto, los nominados subieron a la terraza superior, donde posaron frente a un photocall con una de las enormes estatuas de los Goya. Este fue el momento más destacado de la alfombra roja, el que fue transmitido por televisión. Tras esto, los nominados ingresaron al hall superior del Palacio y luego descendieron a la sala -3, donde se instaló otro. Finalmente se dirigieron a la Sala García Lorca para la ceremonia principal de los Premios Goya.

Las anécdotas que ha dejado la alfombra roja de los premios Goya

La alfombra roja de los premios Goya 2025 estuvo repleta de momentos memorables que captaron la atención de los asistentes y medios de comunicación. Uno de los incidentes más comentados fue el protagonizado por la cantante Melody, futura representante de España en Eurovisión con la canción Esa Diva. A petición de la prensa y por iniciativa propia, Melody interpretó a capela su tema en varios momentos durante su paso por la alfombra roja. Su voz se coló en la retransmisión oficial de RTVE, llegando a interrumpir entrevistas, como la del actor Nahuel Pérez Biscayart. Tanto es así, que la actriz Jedet expresó su molestia, señalando que cada vez que intentaba hablar, Melody comenzaba a cantar nuevamente.

Otro de los momentos destacados fue la aparición del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acompañado de su equipo de seguridad. El político partició en una entrevista con Henar Álvarez y Judith Tiral para RTVE Play. Por detrás de él llegó Miguel Bernardeau, que una vez más esquivó las preguntas de los medios de comunicación. El actor de Élite no se pronunció al respecto de su vida privada, pero tampoco profesional, generando la molestia de los periodistas y reporteros presentes.

La gala también contó con la presencia de Richard Gere, quien recibió el premio Goya Internacional en reconocimiento a su destacada trayectoria cinematográfica. A sus 75 años, Gere acudió al evento acompañado de su esposa, la española Alejandra Silva. Actualmente, la pareja reside en Madrid junto a sus hijos. Gere expresó su deseo de vivir al menos seis años en España para estar más cerca de la cultura y la familia de Silva. A su paso por la alfombra roja, Richard Gere y Alejandra Silva recibieron un obsequio de lo más inesperado: una lata de aceitunas. 

Además, el equipo de la película Buffalo Kids, nominada a Mejor Película de Animación, destacó por llevar a la alfombra roja a un niño con diversidad funcional utilizando un exoesqueleto. Este gesto buscó visibilizar las patologías infantiles y promover la integración de niños y niñas con enfermedades. El niño, vestido con un traje de chaqueta a juego con el equipo de la película, posó para las cámaras haciendo el símbolo de la victoria.

La influencer Chiara Ferragni también hizo acto de presencia en la gala, marcando su regreso a los eventos públicos tras la controversia sobre la infidelidad de su ex marido Fedez. Invitada como embajadora de una marca de cuidado capilar, Ferragni aprovechó su estancia para participar en eventos locales y visitar lugares emblemáticos como la Alhambra. En declaraciones a los medios, expresó su deseo de aprender español y su afecto por ciudades como Granada y Madrid.

Ravioli y biroche: una cena especial

Según ha podido saber LOOK, Richard Gere y el resto de invitados y premiados de los Goya tuvieron ocasión de disfrutar de un menú de lujo, compuesto por entrantes fríos, calientes y una selección de postres. Entre las propuestas que más llama la atención con los ravioli de remolacha y guacamole o el brioche de lomo.

La fiesta post Goya

Al finalizar la gala, los asistentes disfrutaron de un catering exclusivo ofrecido por la empresa Abades, en colaboración con Sabor Granada, que presentó lo mejor de la gastronomía local, con productos de la región y vino de Rioja, uno de los patrocinadores del evento. Pero la celebración no terminó ahí. El hall superior se transformó para la fiesta post-Goya, reuniendo a artistas, invitados y celebridades en un ambiente de camaradería y alegría. Además, varios lugares emblemáticos de la ciudad, fueron también escenario de fiestas privadas para los asistentes más exclusivos.