Evita las puntas marrones en las hojas de las plantas con estos trucos

Ir al vivero de plantas y elegir algunos ejemplares no es difícil, pero mantenerlas en buen estado sí suele ser complicado. Son muchos los problemas que pueden tener tales especies. Uno de ellos evitar las puntas marrones en las hojas, ¿cómo evitarlas?

Este problema se debe a un sinfín de causas. Según la especie, puede ser el resultado de un riego escaso o excesivo, de la falta de nutrientes o de un suelo demasiado fertilizado, etc. Saber qué provoca estas manchas es clave, como prevenir a partir de los conocimientos de los profesionales. Pero, ¿cuáles son las primeras acciones que debes tomar?

Cómo evitar las puntas marrones en las hojas

Antes de entrar en los detalles de sus cuidados, hay que comprender por qué las plantas tienen hojas y qué funciones cumplen. Básicamente, esta parte se encarga de realizar la fotosíntesis, la transpiración y la respiración. Es decir, una planta con ciertas afecciones en sus hojas no tendrá la calidad de vida que merece. Y con el paso del tiempo pondrá en riesgo su supervivencia.

Frente a las apariciones iniciales de ese color tostado típico en las puntas de las hojas de nuestras plantas, debemos descartar posibles desencadenantes de la pigmentación. Reconocer los factores que hacen peligrar su salud es esencial para recuperarlas. Fíjate si la tierra está encharcada.

Cuando es por el riego excesivo o un drenaje insuficiente trae estas consecuencias que rápidamente se hacen notar. Recuerda que debes regar menos en invierno, y que no todas las plantas requieren demasiada agua.

Si la tierra está húmeda y el drenaje es bueno, revisa que no haya otros síntomas que adviertan sobre la presencia de plagas. Encontrar agujeros en las hojas es un aviso de que hay insectos atacando el ejemplar. Aplica el correspondiente insecticida.

Cuidados generales para evitar las puntas marrones

Siempre podemos adoptar algunos cuidados básicos o generales que las protegerán de las amenazas externas. Si sigues estos pasos, seguramente impedirás este síntoma o, al menos, conseguirás que tus ejemplares se recuperen en un par de semanas.

Comprobar el tallo y raíces

Independientemente de las hojas, debes tomarte la molestia de comprobar, tanto los tallos como las raíces de las plantas afectadas. Una hoja marrón cuyo tallo no luce de forma extraña puede explicarse por el proceso de renovación de las diversas especies. Aclarado esto, si tu planta está en una maceta, asegúrate de que la raíz tiene espacio para crecer. Si no es así, muévela.

Corta las hojas marrones

Previo a tomar medidas que signifiquen intervenir más a fondo, corta las hojas con puntas amarillas o marrones y espera unos días. Si no vuelven a aparecer, es porque se trata de su renovación natural. Hazlo de este modo para no echarle químicos innecesariamente.

Prueba con una inmersión

Éste es un secreto de jardinería que pocos tienen en consideración pero es muy efectivo. Consiste en sumergir el ejemplar durante aproximadamente siete minutos y dejarlo que se seque bien. Lo ideal es colgarlo hasta que drene la totalidad del agua absorbida. Puede que sea una manera brusca de recuperarla, pero la inmersión «purifica» la planta y elimina plagas y otras problemáticas.

De hecho, ésta es una técnica de riego no muy difundida pero que tiene beneficios como el que acabamos de comentar.

Si nada de eso funciona, te aconsejamos que busques información en Internet centrándote en la especie de planta afectada. Obtendrás datos concretos para esa especie, y con algo de esfuerzo y cariño lograrás que vuelva a la mejor versión de sí misma.

Haz caso de estos consejos o bien pregunta al profesional que te sacará de dudas.