El Real Madrid necesitaba una carambola que no se produjo para clasificarse para las semifinales de la Liga Endesa. El equipo de Laso, tras haber caído ante Andorra y San Pablo Burgos por sorpresa, vio cómo el Valencia Basket certificaba que no podrá defender su título de campeón de la competición dando igual lo que hiciese contra el Zaragoza.
Los taronja, anfitriones de este torneo sin público, vencieron con máxima solvencia a Gran Canaria por 97-81. El equipo local empezó como un tiro en el primer cuarto llegándose a marchar por una decena de puntos. Los isleños reaccionaron en el segundo periodo igualando el choque, pero una canasta inverosímil de Quino Colom sobre la bocina sería el preludio de la tormenta que vendría en la segunda mitad.
Los valencianos lograron un parcial de 26-12 en el tercer cuarto y pusieron la puntilla en las aspiraciones de los canarios, que de haber ganado habrían pasado también a semifinales. El equipo de Ponsarnau estuvo liderado por el dúo Tobey-Loyd, quienes se combinaron para 44 puntos y 55 de valoración entre ambos.
El Real Madrid se queda sin poder defender un título que ha levantado en cuatro de las últimas cinco temporadas. Curiosamente la única vez que se le privó de la victoria, el Valencia también estuvo implicado venciendo en la gran final. Desde 2008 no alcanzaba unas semifinales de la competición doméstica.
En esta edición de la Liga Endesa, condicionada por el coronavirus, todo puede ocurrir. Las semifinales se celebrarán este domingo a partido único con los duelos entre Barcelona y San Pablo Burgos y Baskonia y Valencia Basket. Todo puede ocurrir y si no que le pregunten al Real Madrid, quien nunca se pensó que podría caer eliminado en la fase de grupos antes de jugar su último partido contra Zaragoza. Algunos todavía se estarán pellizcando para creerlo.