La UEFA sigue su cruzada contra el Real Madrid: ocho meses de constantes ataques y desprecios
La cruzada de la UEFA contra el Real Madrid tiene un nuevo capítulo, tras la repetición del sorteo de los octavos de final de la Champions League, en el que el club blanco fue claramente perjudicado
En los últimos meses, los ataques y menosprecios por parte de la entidad que dirige Ceferin contra los madridistas han sido una constante
La cruzada de la UEFA contra el Real Madrid ha ido un paso más allá después de lo ocurrido en el sorteo de los octavos de final de la Champions League. A pesar de que el sorteo comenzó con normalidad, dando como resultado el duelo que enfrentaba a los blancos contra el Benfica, tras los sucesivos fallos que se dieron posteriormente, se decidió repetirlo sin respetar el cruce que la suerte ya había determinado con anterioridad a los errores. Una decisión que no gustó nada en el seno de la entidad madridista y que supone una nueva jugarreta del organismo dirigido por Ceferin, en la guerra que mantiene contra el club.
Desde el anuncio de la Superliga, liderada por el presidente del conjunto blanco y que ponía en jaque el orden establecido en el fútbol europeo, la UEFA no lo dudó y arremetió contra el Real Madrid con todo su armamento. Las amenazas, las faltas de respeto y los menosprecios por parte del ente continental han sido una constante a partir de entonces.
Lo primero fue con plantear su expulsión inmediata de la Champions League, que aún estaba en curso. Los madridistas vieron como su presencia en las semifinales de la máxima competición el pasado año corrían peligro, debido al enorme terremoto que supuso el proyecto que buscaba relevar a la actual máxima competición. No pudieron hacerlo, pero lo siguiente fue otra nueva amenaza, la de expedientar y expulsar a los tres clubes que se mantenían en rebeldía de toda competición organizada por la UEFA.
Aquella decisión sí que parecía más firme que la primera, aunque al final quedó también en nada. La Superliga se blindó legalmente antes de ver la luz y prueba de ello es el fallo a su favor del Juzgado 17 de Madrid, que llevó a Ceferin a retirar cualquier tipo de medida en contra de los intereses de Real Madrid, Barça y Juventus, así como del resto de equipos que integraron en un primer momento el proyecto, cuyas sanciones fueron también retiradas.
Pero el golpe judicial no evitó los constantes menosprecios y ataques de Ceferin y de la propia UEFA contra ellos. Sobre todo, contra el Real Madrid. El club blanco es el principal propulsor de la competición que dejaría al máximo organismo europeo como actor secundario en el fútbol continental, por lo que ha sufrido las principales represalias.
Destacan las faltas de respeto y el ninguneo de Ceferin durante el pasado verano, cuando tildó a los tres de «ser como niños», afirmando incluso que no le «importaría que se fueran», como si no fuera consciente de la importancia que tienen los tres ya no en el fútbol continental, si no a nivel global. Además, en este tiempo, el esloveno no ha desaprovechado la más mínima oportunidad para tratar de desprestigiar a Florentino Pérez.
También, desde la UEFA se censuró a los tres clubes del anuncio de la presente edición de la Champions, en el que aparecían equipos como Bayern, Chelsea o PSG, entre otros. Parecieron olvidarse de que el rey de la competición, con 13 títulos, es el Real Madrid, mientras que el Barça es otro de los que más suma, con cinco, y la Juventus uno de los equipos con más tradición en la máxima competición, habiendo jugado nueve finales en su historia.
La sección femenina del Real Madrid también se ha visto afectada por la guerra que mantiene la UEFA con el club. Una vez se confirmó la primera presencia del conjunto blanco entre los mejores del continente, con su clasificación para la fase de grupos, fue el único de los 12 equipos que obtuvieron su billete en los play-offs que no recibió felicitación por parte de la cuenta oficial de la Women’s Champions League.
«Es una vergüefa»
La gota que colmó, hasta la fecha, el vaso fue la decisión de repetir íntegro el sorteo de octavos de final de la Champions League. Desde el Real Madrid, principal afectado de la decisión, puesto que los fallos se sucedieron después de que se conociese su emparejamiento, calificaron como una «vergüefa» lo ocurrido en Nyon.
El club considera que la forma de actuar de la UEFA adultera la competición y estudian incluso judicializar el sorteo. El conjunto blanco no se cree las explicaciones que da el organismo dirigido por Ceferin, que culpa de lo sucedido a un fallo de software y podrían llevar el caso al TAS, donde la UEFA debería demostrar su versión de los hechos.
La decisión de repetir el sorteo de los octavos de final de la Champions League no sentó nada bien en el club. No es para menos, pues después de ocho meses de constantes ataques por parte de la UEFA, aunque realmente se trate de un fallo externo a la entidad continental, supone una más contra el Real Madrid.