El Real Madrid no está teniendo suerte con las lesiones en la presente temporada. El mes de diciembre se presenta complicado para el conjunto blanco después de confirmarse este jueves las bajas por problemas físicos de Gareth Bale, Marcelo y Eden Hazard. En el caso del belga, uno de los mejores en los últimos compromisos del equipo merengue, su lesión resulta especialmente preocupante por su duración, que le descarta para el Clásico y las dolencias previas que arrastraba en su tobillo derecho desde 2017.
Tras conocerse que Eden continuaba con dolor en la articulación dañada en el Real Madrid-PSG y acudió con muletas a la cena de Navidad, el Real Madrid emitió un parte médico informando de que el internacional belga sufría una microfisura incompleta externa perimaleolar. Esta lesión, descubierta a través de TAC y resonancia magnética, es más grave que el primer diagnóstico, en el que sólo se observó una contusión, y el tiempo de baja, al tratarse de un hueso parcialmente roto, es de al menos tres semanas.
El Clásico, por tanto, pasaba a resultar una prohibición para Hazard, pero la situación va mucho más allá. El tobillo derecho del ‘7’ madridista se ha confirmado como una zona de riesgo dos años después de que Eden sufriera una rotura le obligó a pasar por el quirófano. Para reparar la zona dañada, los médicos encargados de la operación le colocaron una placa de titanio que permitió una solución al problema, pero un potencial dolor de cabeza para los médicos en caso de que se produjese una nueva lesión en esa zona.
Según especialistas consultados por OKDIARIO, la colocación de una placa en un jugador de élite puede resultar contraproducente a la hora de diagnosticar lesiones posteriores en la zona afectada. Por ello, se aconseja en muchos casos y coincidiendo con un periodo de descanso del futbolista, retirar la pieza artificial en una intervención que no supone un periodo de descanso exagerado y permite una mayor naturalidad en los diagnósticos posteriores.
Hazard, en todo caso, no podrá disputar el Clásico del próximo 18 de diciembre en el Camp Nou. El plazo mínimo es sensiblemente inferior a un mes para recuperarse de una fisura como la que sufre Eden, que cuenta con el agravante de ocurrir en una zona que ya fue dañada con anterioridad y, por tanto, requiere de una precaución extra.