Si había alguna duda, si Ancelotti la tenía, Sorloth las disipó. Militao ya está de vuelta, pero en La Cerámica quedó claro que no está todavía para jugar un partido importante. Mucho menos, para disputar el partido de los partidos, como es la final de la Champions. El brasileño perdió ante los amarillos las opciones, muchas o pocas, de formar de inicio el próximo 1 de junio en Wembley.
Y es que, Sorloth retrató a Militao en los cuatro goles que hizo el noruego a Lunin. Si en el primero las culpas se pueden compartir con Ceballos, que perdió el balón de manera absurda dentro del área, en las otras tres dianas quedó en evidencia. El brasileño perdió todos los duelos con el delantero del Villarreal, lo que provocó la reacción de Ancelotti.
El italiano tuvo que cortar la sangría, sacando del campo a Militao y poniendo en su posición de Nacho Fernández. De esta manera, ante el Villarreal terminó jugando la pareja de centrales que formará ante el Dortmund. El capitán junto a Rüdiger. El cambio surtió efecto.
El último jugador que hizo un póker al Real Madrid fue Robert Lewandowski cuando era delantero del Borussia Dortmund. El polaco le hizo cuatro goles en la ida de las semifinales de la Champions. Once años después, Sorlolth se aprovechó de Militao para meter cuatro goles a los blancos.
Güler tiene que ser importante
Es buenísimo. Demasiado bueno para ponerse a pensar que la próxima temporada no tendrá el protagonismo que se merece este joven de 18 años. Estamos hablando, como no, de Arda Güler, que en La Cerámica hizo dos goles y dio un recital en la goleada de los madridistas contra el Villarreal.
Güler fue titular y una vez más volvió a demostrar el potencial que atesora en sus botas. Su partido fue espectacular. El turco abrió el marcador tras controlar el balón con toda la calidad del mundo para deshacerse del defensa y definir a la perfección en el 0-1. En el segundo, tiró un desmarque que Lucas Vázquez vio para plantarse solo dentro del área y hacer el 1-4.
Güler ya suma seis goles con el Real Madrid en Liga. Uno más que, por ejemplo, Lamine Yamal, aunque la diferencia de minutos de uno y el otro es abismal. El madridista suma 373 minutos en el campeonato doméstico. Es decir, algo más de cuatro partidos completos. Y ha sido capaz de marcar un tanto cada 62 minutos. Espectacular.
El futuro es de Güler y Ancelotti, que asegura que no se contempla ningún tipo de cesión con el turco este verano, debe darle el espacio que se merece. El turco es demasiad bueno como para salir del club y no seguir creciendo vestido de blanco. Por ello, a pesar de la más que probable continuidad de Modric y la llegada arriba de Mbappé y Endrick, tiene que ser un futbolista importante.
La profesionalidad de Lunin
Lunin sabe que no va a jugar la final de la Champions. Una decisión injusta, pero que el ucraniano ha entendido. Por ello, ante el Villarreal es más que probable que jugase su último partido de la temporada y lo hizo con la profesionalidad y la calidad que le ha caracterizado durante toda la temporada. El meta hizo grandes paradas y sólo Sorloth, en cuatro ocasiones, fue capaz de batirle. Poco pudo hacer para frenar al noruego.
Las notas del Real Madrid
- Lunin: 7
- Lucas Vázquez: 7
- Rüdiger: 7
- Militao: 2
- Fran García: 6
- Valverde: 6
- Modric: 7
- Ceballos: 4
- Arda Güler: 9
- Brahim: 7
- Joselu: 8
- Camavinga: 6
- Nacho: 6
- Rodrygo: 6
- Mario Martín: 5
- Ancelotti: 6
