«Olvidemos el Balón de Oro y centrémonos en Mestalla». El Real Madrid ha decidido pasar página y no malgastar esfuerzos en lo ocurrido en París el pasado lunes. Sí, el daño es irreparable y el malestar mayúsculo, pero en el vestuario de Valdebebas quieren que desde hoy a las 16:00 horas, cuando los blancos vuelvan a trabajar tras perder el pasado sábado el Clásico contra el Barcelona por 0-4, sólo se hable de Mestalla y del Valencia.
Sí, será inevitable hablar de lo ocurrido, pero el Real Madrid tiene y debe pasar página. Lo que sucedió el lunes fue un antes y un después para el club blanco. En estos momentos, en la entidad aseguran que el Balón de Oro ya no existe en Valdebebas, queriendo decir que este galardón deja de tener la más mínima importancia en la entidad madridista. Habrá quien piense que la decisión de no acudir a la gala fue la correcta y quien vea esto como una pataleta de mal perdedor, pero lo más importante de puertas hacia adentro es que deben centrarse en lo realmente importante: en el fútbol.
El Real Madrid no está bien y esto es mucho más importante que un Balón de Oro más o menos para los blancos. Los hombres de Carlo Ancelotti están obligados a sumar los tres puntos contra el Valencia en Mestalla para lograr tres puntos que son capitales en la lucha por la Liga. Hay que recordar que los madridistas llegan a este duelo a seis puntos de un Barcelona que, por el momento, no muestra la más mínima debilidad. Si la distancia se amplía esta jornada, la Liga se empezaría a poner realmente complicada para el vigente campeón.
Por ello, en el Real Madrid no quieren seguir mirando a París. Desde el club blanco dan la «enhorabuena» a Rodrigo Hernández y pasan página. No hay nada más importante que el fútbol y los resultados para un conjunto blanco que en las próximas semanas jugará sin red. Sin red en la Liga, donde no pueden fallar, y sin red en la Champions, donde están obligados a seguir sumando de tres en tres para tratar de clasificarse entre los ocho primeros.
Prohibido fallar
Nadie en el Real Madrid se plantea en estos momentos decisiones drásticas respecto al equipo, decisiones que afectarían directamente a Ancelotti. Nadie ha puesto encima de la mesa la opción de destituir al italiano y aseguran que el club tiene crédito, pero al mismo tiempo dejan claro que deben reaccionar cuanto antes. Por ello, ganar en Valencia se convierte en una cuestión de estado en Valdebebas.
En este partido, Vinicius Junior estará en el punto de mira tras no recibir el Balón de Oro. El brasileño tendrá que sufrir la presión de la grada y, quién sabe, si de los rivales. Por ello, el vestuario ha decidido blindar al delantero, apoyándole en momentos complicados como estos y arropándole.