El PSG no se atreve a preguntarle a Mbappé por su futuro en su última entrevista
Mbappé: "Los vínculos humanos son más fascinantes que el dinero"
Mbappé repite la foto que ya se hizo Zidane antes de fichar por el Real Madrid
El futuro de Kylian Mbappé es un tema tabú en el Paris Saint Germain. El jugador termina contrato al acabar la temporada y todavía no ha renovado. En menos de 15 días es libre de negociar con cualquier equipo para irse gratis en el mercado estival y en el Parque de los Príncipes temen su posible marcha. Por ese motivo, la televisión oficial del PSG ha evitado preguntar al francés por sus planes en una entrevista.
En una charla de ocho minutos el futbolista deja titulares como que quiere dejar su nombre grabado «en la historia del fútbol», algo que ya está haciendo. La realidad es que es el PSG quien ha impuesto la ley del silencio sobre el futuro de su estrella porque horas antes, en la entrevista que ha concedido a la revista francesa París Match no ha tenido reparos en hablar de sus deseos para el futuro.
En la entrevista con la televisión oficial del club parisino deja claro que le gusta la presión: «Sí, creo que lo necesito. Necesito sentir la presión. Siempre ha sido así y siempre he querido tener responsabilidades sobre mis hombros, sentir presión, aunque a veces signifique decepcionar. Pero eso es parte del aprendizaje. Nunca me escondí. Creo que también es parte del subidón de adrenalina. Jugamos para participar en partidos de presión, partidos que todo el mundo ve. La presión la tomo positivamente y me gusta, así que no tengo ningún problema con eso… Al contrario: me ayuda a no dormirme».
Respecto a la posibilidad de continuar en la capital de Francia hay silencio absoluto. Mbappé ya ha dejado claro que no se corta a la hora de hablar y por eso tienen miedo en el PSG a preguntarle por su futuro y que la respuesta dej todavía más incógnitas de las que ya hay. Desde las oficinas del club trabajan para intentar convencerle de que continúe vistiendo los colores del conjunto galo otro año más, pero el sueño de ir al Real Madrid de momento está pesando más que los petrodólares.