El Real Madrid vuelve al Santiago Bernabéu para sacarse la espina de la eliminación copera y lo hace con dos bajas fundamentales y con un peligro en el VAR. El colegiado David Medié Jiménez estará en Las Rozas al frente del videoarbitraje, lo que supone un riesgo para el conjunto blanco, que en los partidos que han sido arbitrados por el catalán no ha ganado nunca. Dos partidos, ante Leganés y Levante, y ninguna victoria. Ante los pepineros, en la temporada 19-20, empataron a uno, mientras que cayeron el pasado curso en Valdebebas frente a los granotas, en un encuentro marcado por la polémica.
Fue en el partido disputado el año pasado en el Di Stéfano en el que Medié se convirtió en protagonista absoluto. En los primeros minutos dio un vuelco al encuentro expulsando a Militao, condicionando las aspiraciones de los blancos. Además de aquella polémica que indigno al club y que hizo saltar a Butragueño a la conclusión del choque, también tuvo una decisión cuanto menos cuestionable, al señalar una falta sobre Vinicius que pareció ser dentro del área y, por tanto, penalti.
Desde el VAR comprobaron en qué punto exacto se cometió la infracción y, aunque en la imagen se apreciaba que el jugador brasileño estaba sobre la línea, le indicaron que se cometió fuera, lo que privó a los blancos de poder empatar. Aquella decisión desató la furia de los jugadores del Real Madrid que estaban en la grada, escuchándose las quejas de algunos como Sergio Ramos, que estaba en ese momento lesionado y vio repetida la acción en la televisión.
Polémico desde el VAR
Esta temporada, Medié ya ha estado en dos ocasiones en el VAR en un partido del Real Madrid. Fue en el partido ante el Celta de Vigo, en el que el conjunto blanco se impuso por 5-2, y en la final de la Supercopa de España que enfrentó a los blancos ante el Athletic. En aquellos partidos actuó como debía, no como el pasado curso, cuando estaba al frente de la pantalla en el encuentro que midió a los blancos ante Osasuna en El Sadar (0-0).
En aquel encuentro, el equipo entrenado entonces por Zinedine Zidane no pudo sacar los tres puntos debido a una decisión tomada por Medié que evitó, de nuevo, una pena máxima. En la última jugada del partido, Casemiro sufrió un agarrón en el área y acabó en el suelo, sin poder aspirar a rematar un centro. Pasó inadvertido para el árbitro de campo y para los espectadores, puesto que no se emitió imagen alguna. El catalán pudo aguantar a ver la repetición antes de que se decretase el final, pero no lo hizo, permitiendo a Soto Grado pitar el final.
Ahora, volverá a cruzarse con el Madrid, de nuevo desde el VAR. El conjunto madridista llega al partido mermado por las bajas de Vinicius y Benzema, con dudas tras la eliminación en Copa y tendrá que buscar los tres puntos que le permita tener un colchón de puntos en la cabeza de la Liga. Lo hará con un peligro en Las Rozas: la presencia del catalán en la sala VOR.