Emmanuel Macron ha confirmado su papel en la renovación de Kylian Mbappé por el PSG. El presidente de la República Francesa ha hablado sobre la ampliación del jugador con el conjunto parisino y su intermediación para convencer al futbolista de que se quedara en la capital gala. Aunque ha señalado que no intervino de forma directa, sí que ha reconocido ser parte de las presiones ejercidas sobre el joven delantero, al señalar que tuvo «una conversación informal y amistosa para aconsejarle».
«Yo no intervengo en ningún traspaso. Soy como todo ciudadano en lo que se refiere al deporte. Tengo ganas de ver un buen partido y de apoyar a un equipo, en este caso al Olympique de Marsella. Tuve una conversación con Kylian Mbappé, simplemente para aconsejarle que se quede en Francia. Fue de manera informal y amistosa. El papel de un presidente es defender a su país», ha señalado el presidente de la República de Francia en referencia a lo sucedido con Mbappé durante los meses previos a su decisión.
La renovación de Mbappé fue abordado como una cuestión de Estado que no sólo afectaba a Qatar. Macron estaba más que interesado en que el atacante se quedase en París y no fichase por el Real Madrid. Por ello, se puso en contacto con el futbolista, con el objetivo de presionarle para que se quedase, algo que finalmente consiguió. Ahora, ha hablado para diversos medios galos, reconociendo que telefoneó al futbolista para que no se marchase al conjunto blanco, aunque, según lo que ha indicado, sólo hizo lo que debía, cumpliendo con su deber de «defender al país».
El futuro del jugador de Bondy se había convertido en un culebrón y las presiones eran máximas. El Real Madrid, que abordó su fichaje el pasado verano pero obtuvo la negativa del PSG, esperó para hacerse con sus servicios a que terminase su contrato, contando de antemano con la palabra del jugador de firmar por el club blanco. Sin embargo, en los días previos a que se confirmase su llegada, dio un giro radical a sus preferencias, renovando hasta 2025 por el club franco-qatarí.