Kroos, ante lo imposible
Kroos sufre una microrrotura y tiene «un 10%» de opciones de estar ante el PSG
Ancelotti: «Kroos no se ha lesionado por cansancio, sino por mala suerte»
Toni Kroos busca lo imposible. Las pruebas médicas han confirmado que el alemán sufre una microrrotura en el isquio de la pierna izquierda. Una dolencia que sufrió el jueves y que es posible que se sane antes del duelo contra el PSG que se celebrará el próximo miércoles en el Santiago Bernabéu, pero lo que parece una quimera es que, de estar recuperado y no correr riesgo de recaída, sea capaz de estar al cien por cien en un partido tan exigente como le espera a los blancos contra los parisinos. El germano quiere estar, pero los servicios médicos del club no son nada optimistas.
La realidad es que la dolencia de Kroos es menos grave de lo que podía parecer en un primer momento. Del “casi descartado” para el duelo ante el PSG que trasladaban el jueves desde el vestuario madridista se ha pasado al “tiene un 10% de opciones” de recuperarse para dicho encuentro. Obviamente, algo es algo, pero no parece suficiente. Incluso Ancelotti se ha mostrado optimista en rueda de prensa con la posibilidad de que el alemán se termine recuperando, aunque la realidad es que este tipo de lesiones, por muy leves que sean, tienen unos plazos que se deben de cumplir. Y cuando intentas atajar en la recuperación, el resultado suele ser una recaída.
Por lo tanto, el Real Madrid mimará a Kroos en los próximos días. No estará ante la Real Sociedad y los fisioterapeutas trabajarán sin descanso para tratar de recuperarle lo antes posible, pero el margen de tiempo no parece suficiente. El futbolista tiene esperanzas de poder llegar, pero desde la caseta madridista aseguran que «es seria duda, por no decir que está descartado”.
La lección de Benzema
El Real Madrid ya vivió una situación parecida con Benzema en el partido de ida. El galo forzó para llegar al Parque de los Príncipes y terminó siendo titular, pero su rendimiento estuvo muy lejos de su mejor nivel. El esfuerzo no mereció la pena y las consecuencias, aunque no se tuvieron que lamentar males mayores, podrían haber sido dramáticas para los blancos. En esa ocasión los médicos tampoco eran partidarios de que arriesgase, pero finalmente el deseo del futbolista pesó más que los consejos de los galenos.