El Real Madrid ha puesto precio a Isco Alarcón. El malagueño tiene el cartel de transferible y el club blanco accedería a venderle si un equipo paga una cantidad cercana a los 18 millones de euros más alguna variable que aumentase la cuantía a los 20 kilos. Un precio no demasiado elevado, pero por Valdebebas son conscientes de que no pueden pedir mucho más por un futbolista que finaliza contrato al final de la próxima temporada y que su rendimiento en los últimos años no ha sido el mejor.
Isco está feliz en Madrid, pero sabe que el club le venderá si llega una propuesta interesante. Ni siquiera su mejora física ni que sea del gusto de Carlo Ancelotti, que le conoce perfectamente de su primera etapa como entrenador madridista, le podrían salvar. Y en estos momentos donde mejor cartel tiene es en Italia, sin perder de vista a un Sevilla donde Lopetegui le recibiría con los brazos abiertos, aunque parece complicado que Monchi de el ok a esa operación.
El Milan sí se ha interesado por Isco. Los italianos tendrían una propuesta preparada que podría satisfacer al Real Madrid, aunque el andaluz prefiere esperar. El de Arroyo de la Miel no se quiere precipitar a la hora de tomar una decisión sobre su futuro y aguantará hasta la semana en la que comience la Liga. Será en ese momento cuando esté plenamente seguro del papel que va a tener en la plantilla, que, a priori, será de actor secundario.
Modric, Kroos, Valverde, Casemiro y Ödegaard, si finalmente apuesta por seguir en el club blanco, parten por delante de Isco. Incluso Antonio Blanco, que estará a caballo entre el Castilla y el primer equipo también peleará por minutos. Si el andaluz entiende que tiene prácticamente imposible contar con opciones de tener cierto protagonismo podría tomar la decisión de hacer las maletas.
Se lo tiene que ganar
Si Isco decide quedarse en el Real Madrid se tendrá que ganar cada minuto. Ancelotti sabe perfectamente que el malagueño ya no es el que era. Teniendo en cuenta que en enero será libre para negociar con el club que quiera y con muy pocas opciones de renovar, los blancos son partidarios de que salga ya. Además, la entidad y el entrenador italiano entienden que el futuro pasa por Ödegaard, que debería quitarle opciones de jugar. No obstante, las dudas del noruego sobre su continuidad preocupan a todos.
A pesar de todo, si no llega ninguna oferta e Isco decide quedarse, Ancelotti contará con él. La temporada es larga y todos los jugadores tendrán la oportunidad de tener minutos. De hecho, la imagen que está ofreciendo en esta pretemporada el malagueño es muy positiva, aunque no suficiente para quitarle el cartel de transferible.
