Bale respondió a los pitos con risas… y estuvo a punto de marcar
Gareth Bale volvió al Santiago Bernabéu bajo una sonora pitada, respondiendo con risas y dispuso de una buena ocasión para hacer el tercer gol del Real Madrid
El Bernabéu no perdona: así fue la ensordecedora pitada a Bale en su regreso 773 días después
Al Madrid se le pone jeta de campeón
Gareth Bale regresó al Santiago Bernabéu ante el Getafe. El galés saltó al terreno de juego en el minuto 74 en sustitución de Benzema y tuvo poco más de un cuarto de hora ante su público. Lo hizo, eso sí, bajo una sonora pitada de la grada, que no le perdona los últimos episodios vividos con su selección y, sobre todo, los feos al club. No pareció importarle demasiado al galés, que contestó con una sonrisa y con una acción que estuvo a punto de acabar en gol.
Ancelotti había allanado el terreno de vuelta del británico al Bernabéu, donde no jugaba desde hacía más de dos años. Exactamente, 773 días han pasado entre el último partido de Bale en el estadio madridista, ante el Manchester City, en octavos de final de la Champions en 2020, y el encuentro ante los azulones. El técnico quiso reivindicar la figura del jugador en la historia del Real Madrid y señaló que sería «justo» que jugase antes de marcharse al término de la temporada, puesto que las intenciones del extremo son las de «salir bien» del club.
Pese a ese intento del entrenador madridista por calmar los ánimos de la afición, cuando se produjo la entrada del futbolista, la pitada fue tremenda. Pero el de Cardiff respondió con una sonrisa y trató de intervenir en los ataques del conjunto blanco a lo largo de los más de 15 minutos que estuvo sobre el césped. Incluso pudo hacer el tercer gol del equipo, al cabecear en el primer palo un córner, pero su remate se marchó arriba. Aquella ocasión provocó que parte de los aficionados presentes en el Bernabéu aplaudieran la oportunidad generada por el galés.
El galés respondió así a una pitada provocada por los últimos acontecimientos respecto a su figura. Antes del último parón, el jugador alegó unas molestias en la espalda que le impidieron estar en el Clásico, pero que luego sí que le permitieron salirse con su selección y darle el pase a la final de la repesca, lo que ha provocado la indignación de la parroquia blanca. La pitada no gustó a sus compañeros, puesto que Valverde pidió que cesara y, después, Marcelo apuntó a la unidad de la afición con toda la plantilla de cara al tramo final del curso.