El Real Madrid impone su ley en el Clásico contra el Barcelona

• Kike Sáez
• 01/10/2023 20:31

Un Real Madrid serio, joven y lleno de talento se impuso al Barcelona por 86-79 en el primer Clásico de la Liga Endesa 2023-24. El líder prolongó su racha de invicto contra su máximo rival en una nueva actuación magistral de Facundo Campazzo (17 puntos) y de su mejor aliado Vincent Poirier (22 puntos). Además, Chus Mateo reemplazó a Walter Tavares con un pívot senegalés de 16 años llamado Ismaila Diagne, al que le dio una gran oportunidad y superó a Luka Doncic como jugador más joven en jugar contra los culés. Y lo hizo una gran sorpresa al Wizink Center con su asombroso desparpajo (9 puntos).

«Así gana el Madrid», gritaba la afición madridista en los minutos finales de un Clásico marcado por la seriedad tanto en ataque como en defensa de los pupilos de Chus Mateo, que no concedieron ni un sólo respiro a su eterno rival. Y es que los blancos demostraron haber comenzado la temporada de una manera inmejorable, sumando su segundo triunfo contra el Barça en apenas un mes.

Las ganas de revancha los catalanes se notaban desde que el colegiado lanzó el balón al aire, pero un gran Madrid frustró todas sus esperanzas de auparse al liderato de la tabla en la jornada 3. El baloncesto quiso que un canterano del Real Madrid se convirtiera en el gran fichaje de los culés para esta temporada. Willy Hernangómez volvía a la que fue su casa durante dos años, pero lo hacía desde el bando contrario, y eso no pasó desapercibido para la afición madridista, que lo recibió con una monumental pitada.

Por su parte, Chus Mateo presentaba una gran novedad en el quinteto titular, la de Diagne, un imberbe pívot de 16 años que sentó a Poirier en el banquillo y al que se le encomendó la difícil tarea de hacer de Tavares en su primer Clásico. El caboverdiano volvió a ser baja por un problema en las vías respiratorias y el entrenador madrileño dio la sorpresa entregándole galones en el aro al joven senegalés, quien abrió la lata con una bandeja.

Sólo un minuto y medio tardó Campazzo en dejar su seña de identidad en el Clásico, anotando el primer triple del partido. El Real Madrid comenzaba mandando en la contienda gracias al MVP de la Supercopa y al trabajo en tanto en defensa como en ataque de Diagne. La entrada a pista de Darío Brizuela (14 puntos) le cambió la cara al Barça, que se arrimó al equipo anfitrión en el resultado del primer cuarto (14-13).

Sergio Rodríguez y Poirier iban a marcar terreno con conectando dos brutales jugadas entre ambos, culminadas por el pívot colgándose del aro. Pese al buen primer cuarto de Diagne, la entrada del francés hizo mejorar y mucho a los blancos en la faceta anotadora. Después de varios intentos, un triplazo de Rudy Fernández iba a evitar el primer intento del Barça por abrir brecha en el marcador. Los madridistas se iban ganando al descanso (37-33) y dejando muy buenas sensaciones de cara al segundo acto.

Poirier se viste de Tavares

En la reanudación iba a nacer un nuevo vínculo arrollador en los locales. Campazzo y Poirier se lucieron y pusieron al Madrid una decena de puntos por encima de los culés, obligando a Roger Grimau a gastar un tiempo muerto. El gigante francés se impuso como uno de los jugadores más decisivos de la contienda, con una actuación memorable cuando más se le necesitaba y haciendo que ningún madridista echase de menos a Tavares.

Al Barça no le bastaba sólo con Brizuela y se marchó perdiendo al acto final (59-50). Antes, Chus Mateo reservaba a Poirier, ovacionado por el Wizink en su marcha al banquillo, y volvía a darle la oportunidad a Diagne para los minutos finales. El senegalés se lo agradeció con un mate espectacular a pase del ‘Chacho’ Rodríguez para seguir aumentando su cuenta particular. Lo más destacado en los compases finales del tercer cuarto fue ver como la grada del Palacio de los Deportes celebraba cada tiro libre fallado por Willy Hernangómez.

El Real Madrid hunde al Barcelona

Otro viejo conocido para los madridistas, Nicolás Laprovittola, animó al Barça en el último cuarto, pero la barrera de 10 puntos era indestructible para los catalanes. Poirier volvió a saltar a pista y continuó con su labor de hundir la flota blaugrana, mientras que el siempre decisivo Dzanan Musa se unió a la causa y sumó 13 puntos para aportar su grano de arena en un encuentro que apuntaba a ser de menor anotación.

El francés y el bosnio forjaron una alianza decisiva que acabó por machacar al Barcelona en su primera visita de la temporada al Real Madrid. El partido lo remató Mario Hezonja brindando una brutal asistencia para que Diagne, de nuevo, se subiera a lo más alto del trono del Palacio. Lo próximo será la lucha por revalidar la Euroliga, y la primera prueba será ante Baskonia.