Xavi, el último en saltar del barco a la deriva de Laporta

Xavi Hernández ha sido el último de una ya extensa lista de pasajeros que se han ido bajando del barco de Joan Laporta desde que accediera al cargo en marzo de 2021. El presidente del Barcelona tiene desde entonces un buen número de bajas a sus espaldas, desde el CEO de la entidad al responsable del Espai Barça, desde Mateu Alemany o Jordi Cruyff, al último en bajarse del barco, el técnico culé.

«Xavi nos ha comunicado que a final de temporada. Que va a acabar la temporada. Es una fórmula que acepto porque es Xavi y es una leyenda del Barcelona. Me lo ha propuesto, es una persona honesta. Actúa con mucha dignidad y es una persona que estima al Barcelona», explicaba Joan Laporta tras el anuncio de Xavi, en declaraciones que recogió el propio club. La decisión es del entrenador, que dada la presión –se le cuestionó el puesto desde el pasado verano– y el rumbo de resultados, se retira.

Joan Laporta va camino de su tercer año como presidente del Barcelona, en marzo se cumplirá este tercer ciclo en el cargo, momento en el que aún Xavi, previsiblemente, estará en el banquillo pero ya con su destino y futuro decidido. Será el cuarto pilar fundamental que se desplome del proyecto del abogado barcelonés, que este tiempo ha visto como los cuatro ejes que sostenían la estructura del club se marchan.

En el plano económico y financiero, el hombre elegido para que todo tomara forma y pudieran resurgir en estos términos fue un Jaume Giró, que junto a su equipo se bajó del barco del Barcelona nada más ganar las elecciones, el primero en hacerlo. Rafa Yuste asumió el puesto. También lo hizo el elegido para coordinar y dirigir a la entidad desde el más estricto sentido de organización, Ferran Reverter, que fue CEO durante poco tiempo dado los continuos choques y diferencias que existieron con Laport.

También se bajó del barco Mateu Alemany, otro elegido por Laporta para que controlara desde los despachos el plano deportivo, también dio un paso a un lado junto a su mano derecha, Jordi Cruyff. Deco asumió el cargo, otro buen amigo de Laporta. El último pilar, Xavi Hernández, el más directo en lo deportivo con los jugadores también dice basta. Y quizá, otro amigo del presidente como es Rafa Márquez, ahora en el B, tome el relevo a partir de verano.

Pero no han sido los únicos profesionales, claves en la estructura de la entidad, que han ido yéndose del Barcelona. Otros nombres importantes fueron Ramón Ramírez, Jordi Llauradó, Jaume Llopis y Álex Barbany todos relacionados con la dirección del ruidoso y conflictivo Espai Barça, principalmente el segundo de estos, que era la cabeza visible del proyecto. De nuevo, desavenencias con Laporta y la apuesta por la empresa turca Lamik.

Otros nombres como Enric Llopart y José Elias han ido engrosando estos años la lista de bajas en los puestos importantes y directivos del Barcelona de Joan Laporta, una sangría de personal cualificado que ha ido subsanando con otros perfiles. Voces críticas desde la oposición han destacado que el ahora presidente se ha rodeado de más amigos y familiares que de profesionales cualificados. «Siempre he defendido la necesidad de una gestión profesional, moderna y transparente», decía Víctor Font hace no pocos meses…