Deportes
Liga Santander: Osasuna - Atlético

Joao Félix da licencia para soñar

El Atlético de Madrid se impuso a Osasuna en el Sadar por 1-3 gracias a un doblete de Joao Félix, uno desde el punto de penalti, y el Lucas Torreira, que firmó su primer gol con esta camiseta. Budimir hizo el 1-2 que permitió soñar a Osasuna pero Torreira sentenció

Joao Félix lideró al Atlético hacia una nueva victoria en Liga. Dos goles del luso, uno de ellos de penalti, y otro de Torreira permiten a los de Simeone mantenerse invictos en la Liga Santander y asaltar uno de los campos más complicados de toda la competición. Osasuna peleó hasta el final e incluso recortó distancias por medio de Budimir pero no pudo evitar la derrota (1-3) en un partido muy físico.

La intensidad marcó el encuentro desde el inicio, aunque fueron los locales los que salieron con más fuerza con una ocasión muy clara de Enric Gallego a los dos minutos. Luego respondería Koke con un disparo desde fuera del área, pero hasta ahí llegarían las oportunidades. Osasuna tenía claro que si quería seguir siendo fuerte en casa la intensidad sería clave, y así lo hizo.

No fue el partido más vistoso de ninguno de los dos equipos, todo lo contrario, fue un choque muy trabado y con pocas ocasiones en el primer tiempo. En ese juego los de Jagoba Arrasate se sentían más cómodos, el Atleti tenía muchas pérdidas en la salida de balón en los primeros minutos, estaban algo imprecisos y no conseguían conectar varios pases seguidos.

Oblak y Sergio Herrera apenas tenían trabajo, sin embargo, era Osasuna quien se acercaba con más peligro hacia la meta del esloveno por la banda defendida por Kieran Trippier. Los del Cholo apenas lograban acercarse a las inmediaciones del área rojilla, donde Unai García y David García se mostraban muy sólidos para desbaratar cualquier ataque. Hasta que llegó el gol de Joao Félix. Vitolo tiró de oficio para sacar un petróleo y provocar el penalti de Roncaglia.

La pillería del canario llevó al Atleti al lanzamiento desde los once metros. Joao Félix lo lanzó a la perfección y adelantó a los colchoneros justo al borde del descanso. Ese tanto fue clave ya que Osasuna había merecido más pero le faltó el gol. Ante un equipo como el Atlético si perdonas lo pagas, y eso fue lo que pasó. La segunda parte comenzó con una nueva pena a máxima a favor de los rojiblancos por mano de Oier.

Joao Félix volvió a coger el balón pero esta vez falló. Ajustó tanto que la mandó al palo y el rechace lo cogió Correa pero la mandó fuera. A partir de ahí el Atleti se hizo con los mandos del partido. Simeone tocó algunas teclas en el descanso, pasó a Correa a la punta de ataque y a Llorente a la derecha, y el choque cambió por completo. No se parecía en nada a lo sucedido en el primer tiempo. El segundo era un acoso y derribo del cuadro colchonero, que liderados por Koke tenían a los rojillos contra las cuerdas.

Torreira aplaca el intento de remontada

El capitán estaba de dulce y se gustó metiendo pases filtrados entre los centrales que ponían en apuros a la zaga rival. Cada vez que metía un balón por dentro era sinónimo de peligro. De hecho gozaron de varias ocasiones para rematar el partido gracias a la visión de juego del centrocampista. La sentencia llegaría a 20 minutos del final por mediación, de quien sino, de Joao Félix.

Justo cuando Osasuna intentaba reaccionar, con el Atleti algo menos activo en ataque, el 7 dio la estocada. Ese tanto ponía la guinda a otro gran partido de la joven perla portuguesa que sigue rindiendo a un nivel extraordinario en este inicio de temporada. Ya es el jugador decisivo que resuelve partidos, lo hizo ante el Salzburgo en Champions y lo ha repetido hoy en El Sadar. Si sigue así el Atleti tiene licencia para soñar.

Sin embargo el cuadro de Arrasate no estaba dispuesto a rendirse y metió el susto en el cuerpo a los de Simeone tras el gol de Budimir a 10 minutos del final. Tras el gol se hicieron con el dominio del encuentro y buscaron el empate hasta el último segundo, pero en un contraataque Torreira acabó con todas las esperanzas locales de poder puntuar. El uruguayo firmó su primer gol con la camiseta rojiblanca, un tanto que ponía fin a cualquier intento de remontada de Osasuna y da un nuevo triunfo a los pupilos del Cholo, que siguen invictos.