Una joven muere ahogada en un concurso de comer hot dogs

Aunque en España no gozan de demasiada popularidad, los concursos de comida están muy extendidos en Estados Unidos. Las reglas son muy simples: comer en poco tiempo ingentes cantidades de alimentos. Aunque parezcan inofensivos, la gran mayoría de ellos arrastran una larga lista de fallecidos. Y es que el riesgo de atragantamiento es muy alto. Pues bien, esto es lo que le ha sucedido esta semana a una joven de 20 años en Boston durante un concurso de comer hot dogs.

Madelyn Nicpon era una estudiante de la Universidad Tufts de Massachusetts. El pasado fin de semana murió cuando participaba en un concurso benéfico que consistía en comer hot dogs. Todos los fondos irían destinados a diferentes causas humanitarias.

La joven, de tan sólo 20 años de edad, estaba comiendo perritos calientes a toda velocidad  cuando empezó a asfixiarse con un trozo de comida, y en cuestión de segundos cayó al suelo inconsciente. Inmediatamente le trasladaron al hospital de Boston, pero por desgracia los médicos no pudieron salvar su vida. Murió un día más tarde, según ha publicado el diario ‘The Independent’.

La universidad donde estudiaba ha emitido un comunicando lamentando su pérdida: “Ante esta dolorosa pérdida, nuestro corazón está con la familia y los amigos de Madie”.

Los concursos de comida más peligrosos del mundo

Además del concurso de comer hot dogs, existen otros que también son muy peligrosos:

• Ajo: en Chideock, una pequeña aldea de Inglaterra, se celebra todos los años el campeonato mundial de comer ajo. El ganador es la persona que sea capaz de comer más dientes de ajo crudos por minuto. Eso sí, para que sea válido tienen que haberlo masticado y saboreado.
• Curry: Kismot es un restaurante de Escocia que organiza un concurso que consiste en comer «el curry más caliente del mundo». En 2011 dos participantes tuvieron que ir al hospital.
• Agua: en 2007 una emisora de radio de California organizó un concurso que consistía en tomar la mayor cantidad de agua posible sin ir al baño. Jennifer Strange, la ganadora, bebió casi ocho litros de agua en menos de tres horas. Sin embargo, falleció por hiperhidratación al poco de llegar a casa.