Cuando una celebritie aparece repentinamente con un cambio de look genera un efecto ola mediática. Tenemos el último ejemplo en la actriz Millie Bobby Brown y su espectacular cambio de look apostando por la melena XL en rubio platino. Más allá de gustos y opiniones, el drástico cambio de la actriz plantea un debate acerca de la cara oculta del tono rubio y lo fácil que puede pasar de un símbolo de feminidad y elegancia a toda una pesadilla.
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Pocos debuts hay en la gran pantalla podemos registrar como el que hizo Millie Bobby Brown con el éxito internacional de Netflix, Stranger Things. Siendo cada temporada un fenómeno mundial, catalogado por Forbes como la serie más vista de año en 2022, fecha del estreno de su cuarta temporada.

Once el personaje al da vida, presentó a la actriz a la sociedad de los espectadores bajo la apariencia de una niña, fría, de estética masculina. Y con una característica con la que todos la identificamos: el pelo rapado. Eso fue hace 9 años y en Brown poco queda de aquel personaje.
Pero al parecer ni su matrimonio con Jake Bongiovi hace un año ni su reaparición protagonizando la saga de Enola Holmes o la película Damsel dejan a la actriz fuera de la crítica del ojo público por su aspecto más adulto. El último escándalo, un aluvión de críticas y comentarios sobre su nuevo tono de pelo, llevaron a la actriz a denunciar la situación a través de sus redes sociales.
«Crecí frente al mundo y, por alguna razón, la gente parece no poder crecer conmigo. No soportan ver a una niña convertirse en mujer», afirmó Brown

Ya hemos visto estos cambios repentinos al rubio platino previamente en figuras como Camila Cabello o Kendall Jenner. Y todos ellos siembran siempre la controversia hacia uno de los colores más codiciados y difíciles de conseguir

El peinado cuenta (y suma)
La forma en la que la tonalidad del cabello influye en la forma del rostro también está influenciada por el peinado seleccionado. En el caso de Brown, Cristina Díaz remarca que «el hecho de que llevará un recogido tan tradicional con flequillo recto y cargado con tanto volumen, le ha hecho echarse todavía más años encima».
Nada de cortes rectos
Lo mismo ocurre con los cortes pixie demasiado cortos, un bob recto o un corte de una longitud uniforme (sin capas ni textura), «especialmente los que tienen líneas rectas y ángulos muy marcados, pueden hacer que el rubio platino o rubio extremadamente claro se vea más agresivo y envejezca», aclara Cristina, estilista en Dotti.
Otra de las recomendaciones del salón es evitar un flequillo recto y pesado, como hizo Millie, «ya que puede crear un look demasiado serio y dramático, lo que puede restar frescura y suavidad al rostro. Este tipo de flequillo puede hacer que las facciones se vean más duras».

Por el contrario, opta por cortes que suavicen las facciones, aporten movimiento y frescura. «Los cortes con capas, texturizados o con flequillos suaves son opciones más favorecedoras. También es importante evitar cortes muy rígidos, demasiado cortos y con líneas rectas que puedan dar un aspecto más severo y envejecida», concluye la jefa de estilistas de Dotti.
Sin tener en cuenta tu tono de piel, está destinado al fracaso
«El tono de piel es uno de los factores más importantes a la hora de elegir un rubio», aclara Díaz. Y uno de los condicionantes del shock ante el cambio de Millie Boby Brown, subraya Cristina Díaz, jefa de estilistas de Salón Dotti. «Ha sido un cambio muy drástico y un tono de rubio muy platino que acentuaba las imperfecciones de su piel cálida».

A la hora de determinar qué tonalidad es la más indicada, es crucial tener en cuenta en cuál de estos tres tres tipos principales de tonos de piel se encasilla cada tez:
- Tonos fríos: piel con matices rosados o azulados. Si tienes un tono de piel frío, los rubios ceniza o platino, así como los rubios muy claros, suelen ser una buena opción.
- Tonos cálidos: piel con matices dorados o amarillos. Para pieles cálidas, los tonos de rubio dorado o rubio miel pueden ser más favorecedores. En el caso de Millie, tendría que haber apostado más por un tono de rubio más dorado o miel que platino, ya que el hecho de que llevará un color más claro que su piel la hizo acentuar las imperfecciones de su rostro y arrugas (de ahí que la echáramos más edad), además de dar un aspecto poco natural.
- Tonos neutros: Si tu piel tiene una mezcla de matices fríos y cálidos, puedes optar por tonos intermedios, como el rubio beige o rubio claro natural.
Con las mechas evitarás echarte años de más de golpe
El rubio es el tono de la eterna juventud. Razón de ello es que se trata de un color cuya composición ilumina, suaviza y relaja la apariencia del rostro. Aunque no es la regla general.
«En Dotti siempre recomendamos las mechas si quieres pasar de un castaño a un rubio de manera progresiva y natural, nunca un tinte. Dependiendo del tono de piel y de la base que tengamos de cabello, iremos hacia rubios más claritos o a mechas doradas o beige para que se entremezclen de manera natural con tu base y que no aporten un contraste demasiado drástico», aconseja la jefa de estilistas de Salón Dotti.