Un diputado de Compromís llama «facha» y «gilipollas» al presidente de Aragón en redes sociales

Un diputado de Compromís llama «facha» y «gilipollas» al presidente de Aragón en redes sociales. Josep Nadal, con escaño en las Cortes Valencianas, reclama también la expulsión de Lambán del Partido Socialista.

Nuevo ejemplo de la radicalización de la política valenciana. Un diputado de la formación nacionalista Compromís en las Cortes Valencianas, Josep Nadal, ha tildado de «facha» y «gilipollas» en twitter al presidente de Aragón, el socialista Javier Lambán, que es también secretario general de los socialistas aragoneses.

Lambán subió a su twitter el pasado 20 de noviembre una publicación de un medio con la que pretendía, según se desprende del texto que acompañaba a la imagen, un llamamiento a la reconciliación: «Una lectura muy recomendable para los belicosos nietos de los combatientes de la guerra, que quisieron desde el principio la paz, piedad, perdón y reconciliación». Nadal realizó su propio tuit sobre la publicación del presidente de Aragón, en la que decía que Lambán siempre le ha parecido «un facha y un gilipollas» y agregaba que el PSOE debería expulsarlo a no ser que los falangistas ya sean mayoría dentro del partido. Para terminar con un Arriba España.

La publicación no ha pasado desapercibida en el amplio arco político valenciano. Sin embargo, tampoco ha generado reacciones. La unidad de la izquierda en torno al proceso de paulatina catalanización de la política valenciana los ha centrado en esa cuestión. Sencillamente, lo dejan pasar.

No es la primera vez que Nadal protagoniza polémicas. En 2019, según publicó entonces OK DIARIO, Nadal se negó a hablar en español en el Congreso de Areas Metropolitanas de la Federación de Polígonos Empresariales de la Comunidad Valenciana, lo que motivó que varios empresarios asistentes a esa cumbre empresarial la abandonaran. El pasado febrero, Nadal dio la enhorabuena al independentismo catalán por lo que entendió como su victoria electoral en Cataluña, ya que entendía, también, que ese triunfo ponía fin a lo que denominó estrategia represiva del Estado. Agregó, además, que todas las soluciones al problema político catalán pasaban por el reconocimiento del derecho a la autodeterminación.