Alfombras infantiles: Guía para elegir la mejor alfombra para el dormitorio de los niños

Aunque cuando decoramos y pensamos cómo va a ser el dormitorio de nuestro bebé, lo primero en lo que pensamos suelen ser los muebles o el color de las paredes, existe un elemento que muchas veces se suele comprar al final pero que tiene especial importancia ya que se acaba convirtiendo siempre en uno de los más usados por los niños. Nos estamos refiriendo como no, a las alfombras infantiles de las que ahora os ofrecemos una guía para que sepáis cómo comprar la adecuada.

Alfombras infantiles: Guía para elegir la mejor alfombra para el dormitorio de los niños

Gracias a saber elegir una buena alfombra infantil para el dormitorio de nuestros hijos, conseguiremos que estos puedan estar en su cuarto jugando, descansando, leyendo o pintando sin el «miedo» a que cojan frío por estar en el suelo o a que se les manchen los pies si están todo el rato descalzos.

Además la alfombra infantil suele tener diseños que van acordes a los más pequeños, con letras, colores o dibujos que atraen a los niños, y les invitan a tumbarse sobre ellas no solo para jugar, sino también para relajarse o mirar un cuento.

De este modo, aunque no lo pensemos cuando preparamos el dormitorio infantil, la alfombra de los niños se acaba convirtiendo siempre en un elemento importante para los pequeños de modo que será cuestión de elegir la mejor ¿y cómo hacerlo?.

Lo principal es tener en cuenta varios factores importantes y que son estos que ahora te enumeramos:

• Seguridad: Debe ser suave pero a la vez compacta, no debe haber partes pequeñas que se desprendan y puedan ser ingeridas. Por otro lado es posible que tu hijo intente morder todo durante el período de dentición incluyendo la alfombra así que esta no debe contener productos tóxicos que puedan dañarlo de alguna manera.
• Higiene: Claramente depende de ti limpiarla con frecuencia, siguiendo las instrucciones del producto (cambian según el material). Sin embargo, si compras un producto de buena calidad, hipoalergénica y antiácaros, sin duda estarás mucho más tranquilo cuando veas a tu hijo jugando feliz en su alfombra.
• El material: No intentes ahorrar en la compra de la alfombra infantil porque lo que se descuida por parte del fabricante es la elección del material, que es el aspecto más importante. Debe ser resistente, fácil de limpiar y obviamente no tóxica. ¡Recuerda que es una inversión que te acompañará por muchas fases de su crecimiento!

Tipos de alfombras infantiles

Por otro lado,están los tipos de alfombras infantiles. Básicamente, existen dos tipos diferentes, las adecuadas para bebés y las que son para niños un poco más mayores. El recién nacido necesita una alfombra suave que además puede incluir elementos de juego. A menudo, estas alfombras también tienen efectos de luz y sonido. En definitiva, debe ser un espacio estimulante, que le induzca a jugar. Para él, todo será un descubrimiento y se animará a realizar nuevas experiencias tanto desde el punto de vista sensorial, como cognitivo y motor.

El niño mayor, en cambio, preferirá una alfombra que le permita una mayor maniobra de movimiento, con todos sus juguetes favoritos dispuestos sobre ella. Básicamente, por lo tanto, puedes evaluar estos dos tipos diferentes de alfombra y ser consciente que en realidad necesitarás comprar ambas para cada fase de crecimiento de tu hijo.

El factor espacio

Además de lo mencionado, debes tener también en cuenta otro factor importante: el espacio. Si tienes una casa pequeña y necesitas quitar la alfombra cuando no la necesites o moverla fácilmente de una habitación a otra, tal vez las alfombras de rompecabezas sean lo mejor para ti. Súper coloridas y estimulantes para el niño, una vez “desmontadas” ocupan muy poco espacio. Además, ¡el niño también se divertirá mucho en la fase de construcción!

Si, por el contrario, prefieres una alfombra estática, hoy puedes elegir entre las de un solo color, que para los niños son quizás las menos adecuadas, hasta las coloreadas e incluso las hay interactivas, de modo que debes valorar cómo es tu hijo y comprar entonces la alfombra que más se adapte a él teniendo en cuenta si le gusta determinado color o estampado o si crees que una alfombra que emite sonidos por ejemplo puede estimularle para que juegue encima de ella.