La pista que se dejó Daniel Sancho: un ticket de compra que fue clave para la Policía

La pista se dejó el chef Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho, clave para la Policía tailandesa fue el ticket de la compra de los cuchillos que se quedó entre las bolsas donde Daniel Sancho habría metido los restos de Edwin Arrieta Arteaga y después habría tirado al basurero. El ticket habría llevado a la Policía tailandesa a la tienda donde se habría efectuado la compra, que se habría realizado en una tienda de Koh Phangan el 1 de agosto. Allí habrían identificado al hijo del actor, cuya imagen además aparecería en la cámara comprando bolsas de basura grandes, guantes de goma, detergente, esponjas, estropajo de acero y un cuchillo de picar carne. Sin embargo, la imagen no habría sido determinante para descubrir su identidad entonces, sino cuando se subiría a una motocicleta que habría alquilado, cuya matrícula habría permitido a la Policía tailandesa vincular al hijo de Rodolfo Sancho con el cirujano colombiano.

Tras este descubrimiento, a la Policía le llamó especialmente la atención que fuera el mismo joven que apenas unas horas antes había acudido a una comisaría a denunciar la desaparición de un colombiano que estaba pasando con él las vacaciones en la isla.

El viernes, la Policía de Koh Phangan habría interrogado al hijo de Rodolfo Sancho acerca de la desaparición de Edwin Arrieta Arteaga, de 44 años y nacionalidad colombiana, en relación con su desaparición. En un principio habría negado estar implicado, pero finalmente habría admitido su culpabilidad después de un intenso interrogatorio.

Posteriormente, el teniente general Surapong Thanomjit, comisario de la Policía Provincial, habría confirmado que se habrían encontrado más pruebas, al parecer partes de un cuerpo humano, tras registrar una habitación de hotel en la que se cree que se habrían alojado. Los forenses habrían recogido muestras de pelo y tejido en el desagüe de la habitación.

Qué ha pasado con Daniel Sancho

Como ya se ha indicado, Daniel Sancho habría acudido a la comisaría de Koh Phangan el jueves 3 de agosto por la noche para denunciar la desaparición de Arrieta. Una denuncia que habría tenido lugar después de que se difundiera la noticia de que se habían encontrado partes de un cuerpo humano. Los basureros habrían descubierto el jueves partes de un cadáver, entre ellas una pelvis serrada y unos intestinos de unos cinco kilos de peso, dentro de un saco de abono en un vertedero de Moo 4 de Koh Phangan. El viernes 4 de agosto habrían encontrado más partes del cuerpo en una bolsa de plástico negra en el mismo lugar, la cual contendría dos piernas, una camiseta negra, un pantalón corto y un bóxer rojo. Estás bolsas, como se ha indicado con anterioridad, contenían el ticket que habría delatado al hijo de Rodolfo Sancho.

Sancho habría declarado a los investigadores que habría llevado a Arrieta a su habitación, afirmando que el hombre habría querido mantener relaciones sexuales con él, pero que el hijo de Rodolfo Sancho se habría negado. En un arrebato de ira, habría propinado un puñetazo a su amigo, provocando la caída de la víctima, que se habría quedado inconsciente después de golpearse la cabeza con la bañera. Sancho habrían decidido entonces cortar el cuerpo en 14 trozos y meter algunas partes en una bolsa de viaje. También algunas partes en bolsas de plástico, que habría tirado a un contenedor de basura.

Se habría llevado la bolsa de viaje para tirarla al mar en la playa de Salad, cerca de su hotel. Después habría vuelto a su habitación y se marchó el jueves a las 9 de la mañana.

Más tarde se habría ido a una fiesta de Plenilunio con dos mujeres que habría conocido en el hotel. Tras regresar de la fiesta, se habría dirigido a la comisaría de Policía, donde habría presentado la denuncia.

El Tribunal Provincial de Koh Samui ha aprobado una orden policial de detención contra el hijo de Rodolfo Sancho, sospechoso de haber asesinado y descuartizado el cuerpo del cirujano colombiano en una habitación de hotel en la isla de Koh Phangan. La orden se habría autorizado después de que una prueba de ADN de partes humanas halladas el jueves por unos basureros en un vertedero de la isla demostrara que eran de Edwin Arrieta Arteaga.