‘Juego de Tronos’: Resumen rápido y sencillo de la segunda temporada

No puede hacerse de forma tan rápida como nos gustaría ni es tan sencillo como quizá pueda parecer en un principio, pero seguimos con el repaso a lo sucedido en anteriores temporadas de ‘Juego de Tronos’. En estas líneas, volvemos la vista atrás para quedarnos con la segunda entrega, cuando ya empezaban a engancharse por millones a la ficción televisiva basada en la saga literaria de George R.R. Martin.

Lo dejamos con la muerte de Ned Stark, la batalla entre los Stark y los Lannister, Joffrey siendo un rey ilegítimo, Jon Snow entendiendo de qué iba la Guardia de la Noche y Daenerys teniendo tres dragones como hijos.

En esta segunda temporada, Joffrey ¡Lannister! sigue siendo el Rey cruel que terminó siendo en la primera temporada, el mismo que ordenó la muerte de Ned. Sansa Stark sigue a su lado, prometida a él, como decidieron sus padres lo que parece ser dos vidas atrás. Sansa aguanta todo tipo de maltrato a su lado, y la diferencia entre ambos la vemos en una escena del principio: Joffrey manda matar a ser Dontos el Rojo por acudir borracho a un torneo, pero Sansa se las ingenia para conseguir que permanezca con vida. Entre ellos, el Perro, que parece dispuesto a cuidar que Joffrey no se sobrepase con ella.

Por otro lado, Arya Stark sigue su camino hacia el Norte. Descubre su identidad ante Gendry, el bastardo de Robert Baratheon. Se hacen amigos y juntos viven muchas miserias; terminan en Harrenhal, hogar de Lannister, al servicio del cabeza de familia: Tywin Lannister. El patriarca no descubre a Arya, pero sus formas le hacen querer que se convierta en su copera. Así es como termina sirviéndole, siendo muy cercana a él, regalándonos algunos de los mejores momentos de la serie. En esta temporada también conoce a Jaqen H’ghar, que demuestra su habilidad a la hora de asesinar personas. Y empieza con su lista.

En ausencia de Tywin Lannister, que sigue en la guerra, Tyrion es nombrado por su padre Mano del Rey; puede que su padre lo desprecie, pero es consciente de su inteligencia. De hecho, Tyrion se convierte en una buena Mano, para un mal Rey. Toma varias decisiones interesantes, juega con las personas que tiene alrededor y en general nos demuestra que sabe bien de qué va todo eso del juego de tronos. Una de sus decisiones más importantes: envía a Myrcella, hija de su hermana Cersei, a Dorne, pueblo del que todavía no sabemos demasiado, salvo que son enemigos de los Lannister.

Tyrion intenta mantener a raya a Joffrey, aunque sin demasiado éxito. Cersei, por el contrario, se ve impotente a su lado, viendo las atrocidades que comete su hijo y sin poder hacer demasiado al respecto. En esta temporada demuestra inteligencia, pero también crueldad. Y lamenta la ausencia de Jaime, que sigue en manos de los Stark. Los Siete Reinos empiezan a conocer la verdad que hay entre ellos, y para evitar que sea evidente Cersei manda asesinar a todos los bastardos de su ex-esposo Robert. Al fin y al cabo, Ned se dio cuenta de lo que estaba sucediendo cuando advirtió lo rubios que eran los hijos entre Cersei y Robert, mientras que Gendry había heredado el pelo oscuro de su padre. Janos Slynt es el encargado de encabezar este acto, después de que Cersei prescindiera de Ser Barristan Selmy; Tyrion se deshace de él tras ello, lo envía al Muro y se gana así un poco más nuestro cariño.

Si Winter is coming era algo así como el lema oficial de la primera temporada, en esta temporada se repitió mucho The North Remembers. El Norte recuerda. El Norte no olvida a Ned Stark, a quien se sigue mencionando en cada episodio, ni olvida lo sucedido. La lucha sigue, comandada por un Robb Stark que sigue imbatible… Y que empieza a tomar malas decisiones.

La primera: envia a Theon Greyjoy a buscar la alianza con su padre, con su familia. Cuando Theon llega a las Islas del Hierro, su padre prácticamente lo rechaza. Él se da cuenta de que tiene que tomar una decisión: elegir entre la familia, que no es la suya, con la que ha pasado toda su vida, o elegir a su familia de sangre. Confundido, elige a esta última. Así es como se lanza a la conquista del Norte. Theon arrasa con Invernalia, y hace creer que ha asesinado a Bran (que sigue con sus visiones del Cuervo de Tres Ojos) y Rickon Stark. Los pequeños consiguen escapar con Hodor y Ossa, una salvaje que ha demostrado que los salvajes no son lo que nos cuentan.

Más malas decisiones de Robb Stark: Roose Bolton de aliado, un norteño del que nos vamos a acordar mucho. También necesita a Walder Frey, por eso se promete a una de sus hijas… Promesa que rompe, pues se enamora de lady Talissa y se casa con ella. Desde luego, no podía salir nada bueno de aquí.

Jaime Lannister sigue en manos de los Stark a principios de temporada. Trata de huir y se lleva por delante a uno de los hijos de Rickard Karstark, el gran aliado de Robb. Karstark busca entonces venganza y reclama la cabeza de Jaime; Catelyn Stark, consciente de que si Jaime muere los Lannister matarán a sus hijas, lo ayuda a escapar en uno de los momentos clave de toda la serie. Brienne de Tarth es la persona responsable de llevarlo de vuelta a Desembarco del Rey; Jaime promete, a cambio, que devolverá a las jóvenes Stark.

Al margen de la guerra Lannister – Stark, la guerra Baratheon. Stannis y Renly, los hermanos mayor y menor respectivamente de Robert Baratheon, se enfrentan entre sí -también con los Lannister- por el Trono. Stannis cree que es el legítimo heredero; Renly cree que es el Rey que merecen los Siete Reinos.

A Stannis lo conocemos bien en esta segunda temporada. A su lado tiene a ser Davos, honrado, honesto y de buen corazón. Y a Melissandre, una predicadora que dice servir al Señor de la Luz y a quien ya en estos capítulos la vemos haciendo cosas que nos hacen tener fe. Como dar a luz a una sombra con el rostro de Stannis, sombra que acaba con la vida de Renly en el quinto episodio. Uno menos.

Renly tenía a su lado a Brienne de Tarth, a quien acusan de su asesinato. Brienne estaba, en realidad, enamorada de él, y tras su muerte se marcha con Catelyn (que se encontraba en el campamento de Renly intentando cerrar un pacto para su hijo). También tenía a su lado a la casa Tyrell, la segunda casa más poderosa de los Siete Reinos.

Justo antes de la muerte de Renly, Meñique, que sigue enredando todo a placer, se presenta oportunamente en el campamento. Entiende las intenciones de Margarey Tyrell (ser la reina), y actúa en consecuencia. Tras la muerte de Renly, consigue sellar un pacto entre los Lannister y los Tyrell, que les lleva a la victoria contra Stannis en la conocida como la Batalla del Aguasnegras. Ya sabéis: fuego valyrio, Tyrion al frente, llegada triunfal de Tywin Lannister y los Tyrell justo antes de que Stannis consiguiera entrar en la fortaleza donde se encontraba Cersei con sus hijos y las damas de la corte, Sansa incluida.

Tras la gran victoria y con esa alianza, Joffrey rompe su compromiso con Sansa para prometerse con Margarey. Una imagen preciosa: la de Sansa riéndose tras conocer la noticia. Meñique le quita la sonrisa de la cara al recordarle que sigue en peligro, y nos mete a todos incertidumbre en el cuerpo cuando le promete llevarla a casa.

Al norte, la Guardia de la Noche se marcha de expedición más allá del Muro. Nos enfrentamos por primera vez a los salvajes, pues Jon, comandado por Qhorin Mediamano, conoce a Ygritte. Incapaz de matarla, termina siendo su prisionero, como el propio Qhorin. En un plan ideado por el gran explorador, Jon mata a Qhorin para enfrentarse entre los salvajes, poniendo como excusa haberse enamorado de Ygritte (excusa, pero no mentira).

Al otro lado del mar Angosto, Daenerys empieza a morirse en el desierto. Los dothrakis la han abandonado tras la muerte de Khal Drogo, solo quedan unos pocos a su lado. También Jorah (que abandona su colaboración con la corona de Poniente) y sus dragones, a quienes vemos crecer. Finalmente, llegan a Qarth, que termina siendo la primera ciudad que Daenerys conquista tras derrotar a sus gobernantes y a la siniestra Casa de los Eternos.

La última imagen de la temporada: Samwell Tarly viendo el resurgir de los Caminantes.