¿Un mes entero sin coche? Lérida demuestra que es posible dejarlo aparcado para moverse por la ciudad
Para participar hay que vivir en Lérida, moverse en coche y saber montar en bicicleta
La iniciativa ha sido destacada por la red de Ciudades que Caminan
El Ayuntamiento de Lérida ha confirmado la celebración anual de esta iniciativa
Facilitar que dejemos el coche aparcado y que apostemos por otras opciones de movilidad urbana, como el autobús, la bicicleta o caminar, que a menudo resultan más rápidas, baratas y sostenibles que el vehículo privado: este es el objetivo de la iniciativa municipal Un mes sin mi coche que promueve el ayuntamiento de Lérida.
Ya se han celebrado dos ediciones con el mismo formato. El municipio selecciona a diez personas que se mueven en automóvil, les proporciona un kit de movilidad, y les realiza un seguimiento continuo a cargo de expertos en la materia. Todo ello para que los ciudadanos puedan experimentar, durante 30 días, cómo es desplazarse por su ciudad sin vehículo privado.
El propósito de la Paeria (denominación tradicional del ayuntamiento leridano) es promover hábitos de movilidad sostenible. «Aunque en determinados casos el uso del coche es necesario, una parte muy importante de los desplazamientos urbanos se realiza por pura inercia. Muchas personas recurren al vehículo privado incluso para trayectos cortos o perfectamente asumibles a pie, en bicicleta o en transporte público», afirma Cristina Morón, tercera teniente de alcalde y concejal de Seguridad, Movilidad y Civismo.
Requisitos
Los requisitos para participar en esta iniciativa son ser mayor de edad, estar empadronado en Lérida, disponer de carné de conducir, utilizar habitualmente el coche en los desplazamientos diarios y saber montar en bicicleta.
«El objetivo es seleccionar personas que realmente dependan del coche, para que la experiencia sea significativa y representativa», detalla Morón.
Dos ediciones
En cada una de las dos ediciones celebradas hasta la fecha —la primera arrancó en mayo de este año; y la segunda comenzó en septiembre, en el marco de la Semana de la Movilidad— han participado diez personas elegidas entre todas las solicitudes, que llegaron a 110 en el caso de la primera convocatoria.
«Más que un perfil concreto, se busca diversidad: personas con diferentes rutinas, barrios, necesidades y contextos. Esto permite analizar cómo distintas realidades afrontan el reto de vivir sin coche y ayuda a detectar barreras y oportunidades desde múltiples perspectivas», remarca la responsable municipal.

Kit de movilidad
A las personas seleccionadas se les entrega un kit de movilidad que incluye un abono para los autobuses urbanos de Lérida, una bicicleta eléctrica con casco y candado, una mochila, una botella reutilizable, un reloj cuentapasos y planos de la ciudad. Los participantes cuentan, además, con asesoramiento técnico durante todo el mes para facilitar la transición hacia los nuevos modos de transporte.
«Al proporcionar alternativas reales, se demuestra que existen opciones más eficientes, saludables y sostenibles. Esta experiencia práctica puede romper rutinas muy arraigadas y favorecer la adopción de nuevos hábitos. Además, el testimonio de los participantes actúa como altavoz para inspirar a otros ciudadanos», sostiene Morón.
Precisamente, una de las labores de la Paeria es recoger las valoraciones de los participantes para identificar motivaciones, dificultades y mejoras.
La Broye
La iniciativa se inspira en el exitoso programa de la región suiza de La Broye, situada entre Berna y Lausana.
En palabras de Morón: «De la experiencia suiza destaca su enfoque integral: la selección de participantes con perfiles diversos, un kit de movilidad flexible y personalizado, y un seguimiento cercano mediante sesiones y canales de comunicación. También sobresale la evaluación final, que permitió identificar barreras reales y formular recomendaciones de política pública».
Tras finalizar el experimento suizo, el 10% de los 33 participantes dijo que quería vender su coche, y el 24% tenía pensado disminuir su uso. «Su principal aportación fue demostrar que reducir el uso del coche es posible si se facilitan alternativas adecuadas y un acompañamiento constante», insiste la concejal.

Continuidad
Después de las dos primeras ediciones de Un mes sin mi coche, La Paeria ha dejado claro que su intención es dar continuidad al programa. «El éxito de las primeras ediciones y el reconocimiento externo recibido hacen prever que la iniciativa pueda consolidarse como un referente anual y una seña de identidad de la apuesta de Lleida por una movilidad más sostenible, humana y saludable», asegura Morón.
Una muestra de este éxito es que la iniciativa fue elegida por la red de Ciudades que Caminan como ejemplo de buenas prácticas en movilidad urbana. Dicha plataforma dedica un artículo de su blog al proyecto y también a otra iniciativa ilerdense, LABici.
«Ambos proyectos nacen como una herramienta transformadora para fomentar hábitos de movilidad más sostenibles, saludables e inclusivos, y se desplegará en diversas fases con visión de futuro, vinculada también a proyectos de empleo juvenil y apoyo al emprendimiento social», según el propio ayuntamiento.
LABici
En el caso de LABici, Morón explica que este programa municipal combina la entrega de bicicletas —tanto recuperadas como eléctricas— con formación en seguridad vial y acompañamiento.
«Además, se está desarrollando el Espai LABici, concebido como un centro de referencia para la comunidad ciclista. Todas estas acciones refuerzan el objetivo municipal de promover la movilidad activa y reducir la dependencia del coche privado», concluye la responsable municipal.