La Ley de Bienestar Animal exigirá a los nuevos dueños de perros un curso obligatorio de cuatro horas
Conoce los cambios que afectarán a tus mascotas con el nuevo Real Decreto que se ha remitido a las comunidades autónomas y a los principales actores del sector
El nuevo texto también afecta a la gestión municipal y a los criadores de animales con el objetivo de minimizar el abandono de mascotas y promover el sacrificio cero
Las comunidades autónomas ya conocen el borrador del decreto ley que desarrolla la Ley de Bienestar Animal, un texto que despeja muchas dudas acerca de su desarrollo y presenta multitud de novedades como la realización de un curso obligatorio de formación de cuatro horas para los nuevos dueños de perros.
En un principio, la pretensión era el aprobar un nuevo reglamento que desarrollara la Ley de Bienestar Animal, aprobada en marzo de 2023, pero el Gobierno ha optado por aplicar un Real Decreto para acompañar a la norma.
El Ministerio de Derechos Sociales envió recientemente el documento, que será debatido mañana 17 de julio y al que podrán proponer sus modificaciones hasta el 31 de agosto desde las autonomías y el sector. El nuevo texto también afecta a la gestión municipal y a los criadores de animales con el objetivo de minimizar el abandono de mascotas y promover el sacrificio cero.
Curso obligatorio
La gran novedad es el cambio que se ha producido, ya que deja de lado la pretensión inicial de la Ley de que todos los dueños de perros debían pasar un curso obligatorio.
De esta forma, se modifica la pretensión del gobierno de que los actuales dueños de estas mascotas tendrían que pasar esta «formación» y acreditar su realización por una autoridad competente.
Ahora, la novedad es que, al adquirir o poseer un nuevo can, los nuevos dueños de perros deberán pasar por un curso obligatorio, preferentemente on line, de cuatro horas, gratuito y con validez indefinida, es decir, sin que sea necesario renovarlo.
Plazos para los dueños
El plazo para realizar dicho curso será de seis meses desde la entrada en vigor de dicho Real Decreto, y sólo tendrán que obtener el certificado quienes adquieran, adopten o acepten en cesión un perro a partir de los seis meses de la entrada en vigor del real decreto.
Es decir, el curso de tenencia responsable no lo tienen que realizar todos los dueños de perros, sino quienes lo adquieran con posterioridad a que se apruebe la norma, una fecha todavía sin determinar, ya que tras el 31 de agosto se expondrá públicamente a partir de septiembre.
Seguro obligatorio
Otra de las principales medidas en el borrador, es la obligatoriedad de que los perros de compañía están cubiertos por un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros, con una cobertura mínima de 100.000 euros, durante toda la vida del animal. La propuesta de texto refleja que los seguros de hogar que incluyan esta cobertura serán válidos y que el plazo será el mismo que el estipulado para el curso.
Otro de los cambios que se proponen es el del rescate o auxilio de animales que estén desatendidos o en situaciones de riesgo. La nueva redacción propone un procedimiento específico para que las autoridades locales rescaten animales desatendidos en fincas o confinados en recintos abiertos.
Este procedimiento se extiende a animales encontrados solos en vehículos en condiciones peligrosas que puedan poner en peligro la vida del animal. Los animales podrán ser rescatados por los servicios de emergencia siempre que no se localice al titular del vehículo y podrán ser trasladados a centros de acogida hasta que se resuelva su situación de abandono.
Cría y abandono
La iniciativa propone que se introduzcan registros centralizados para criadores, núcleos zoológicos y entidades de protección animal, que deberán ser gestionados por las comunidades autónomas.
Por otro lado, se creará el Sistema Central de Registros para la Protección Animal, destinado a coordinar la información a nivel nacional y elaborar estadísticas sobre protección animal.
La norma regula la cría de animales, permitiendo únicamente a aquellos registrados como «reproductores» a tener camadas. Además, se establecerá un protocolo para casos de reproducción accidental, todo ello con el objetivo de luchar contra el abandono, maltrato y conseguir el sacrificio cero.
Además, por primera vez, se regulará la actividad de los profesionales del comportamiento animal para combatir el intrusismo profesional y tener control sobre la cría de perros, gatos y hurones.
Perros peligrosos
Otra de las inclusiones y desarrollo en la nueva normativa será las modificaciones en la normativa de perros potencialmente peligrosos (PPP). El nuevo borrador muestra que estos perros puedan dejar de ser clasificados como tales si superan una prueba de aptitud a los 12 meses de edad. Los perros que no superen esta prueba no podrán reproducirse.
El listado de perros considerados potencialmente peligrosos incluye las tipologías Pit Bull Terrier, Staffordshire Bull Terrier, American Staffordshire Terrier, Rottweiler, Dogo Argentino, Fila Brasileiro, Tosa Inu y Akita Inu, un listado que puede ser ampliado por las comunidades autónomas.
Además, el texto remitido a los principales actores también implica a que los municipios y comunidades, ya que se incluyen medidas de protección de las colonias felinas. Cualquier reubicación deberá ser aprobada por un veterinario para minimizar el impacto negativo en la biodiversidad local.