Sueño al volante, peligro constante
La Fundación CEA es la responsable de un importante estudio del que hoy nos hacemos eco. ‘Sueño y fatiga, ¿cuáles son los hábitos de los conductores españoles?’ tiene como objetivo averiguar el conocimiento que tienen los conductores españoles de la importancia del descanso a la hora de ponerse al frente de un vehículo.
Este tema es algo vital a la hora de prevenir accidentes. Y se trata de algo sobre lo que tenemos un desconocimiento que llega a ser preocupante. Tanto es así, que hay un porcentaje muy elevado de conductores, casi un 60%, que ha sufrido micro sueños al volante. Además, más de un 70% reconocen haber tenido la sensación de quedarse dormidos al volante. Y todo esto viene por nuestras malas costumbres preventivas a la hora de afrontar un viaje. Es muy importante, por ejemplo, descansar 8 horas antes de afrontar un trayecto largo.
Y ojo con esto si lo relacionamos con el punto de vista jurídico, porque de probarse que el conductor se ha quedado dormido al volante, y esto fuese la causa de un accidente con resultado de daños personales, éste puede ser castigado por una imprudencia grave con un máximo de 10 años de retirada del permiso de conducir y 5 de prisión.
También tenemos que tener especial cuidado tanto con los trastornos del sueño como con los tratamientos farmacológicos, pudiendo ambos ayudar a tener o incrementar la sensación de fatiga, a producir situaciones de somnolencia o incluso dormirse al volante. Es importante que los médicos informen de manera correcta y precisa a sus pacientes que se pueden encontrar, por tratamiento o enfermedad, expuestos a estos casos de especial gravedad.
El estudio de la Fundación CEA, en imágenes
Sueño al volante, los datos
Según el estudio de la Fundación CEA, sabemos que el 71,65% de los conductores reconoce haber sufrido somnolencia mientras conducía. Además, durante el viaje, estos tienen diferentes hábitos a la hora de hacer descansos, pero es alarmante ver que sólo un 49,93% ¡solo descansa cuando se siente cansado! Recordad que siempre hay que hacer paradas cada dos horas para refrescarse y estirar las piernas al menos.
Uno de los datos más reveladores que contiene esta encuesta es que un 59,22% de los conductores reconoce haber tenido alguna vez la sensación de quedarse dormido al volante durante un lapso de tiempo. Estos son los denominados ‘microsueños’, uno de los efectos más negativos de la somnolencia que pueden acabar provocando un accidente de tráfico. Son breves lapsos de tiempo (2-3 segundos) donde el conductor cierra los ojos, se duerme y pierde la consciencia respecto a la carretera, señales u otros vehículos. Estos causan el 24% de los accidentes mortales en autopista.
Los conductores que presentan un riesgo mayor de accidentes por sueño son fundamentalmente jóvenes entre 18 y 29 años, trabajadores a turnos, conductores que lo hacen bajo efectos de alcohol y/o drogas y aquellos que presentan enfermedades relacionadas con el sueño. En cuanto a la accidentalidad vial laboral, la mayoría de los accidentes de tráfico mortales ocurren de lunes a viernes, de 8 de la mañana a 8 de la tarde. Es éste un recorrido en el que se baja la guardia por su habitualidad pero en el que concurren, muy a menudo, riesgos como la rutina, las prisas o el cansancio, auténticos enemigos de la seguridad vial.