A Kiko Matamoros le gusta el riesgo: su última imprudencia al volante
Una nueva imprudencia se suma a la de conducir con la ITV caducada
Si hace apenas unos días LOOK desvelaba la infracción que Kiko Matamoros llevaba cometiendo con su vehículo desde el pasado mes de mayo, una nueva imprudencia se suma a la lista de situaciones que podrían empeorar la complicada situación del colaborador de ‘Sálvame’.
Los hechos tuvieron lugar cuando Matamoros acudía a una oficina de la Agencia Tributaria en Pozuelo de Alarcón. Cuando los reporteros le preguntaron si las gestiones estaban relacionadas con la deuda de un millón de euros que le reclama Hacienda, Kiko, visiblemente malhumorado, espetó: «No, he ido a atracar». Tras estas bruscas declaraciones, el televisivo colaborador se introdujo en su coche, un Jaguar XK8 de 1969 que tiene la ITV caducada desde mayo, a pesar de las graves consecuencias que circular sin este requisito obligatorio puede llegar a tener.
No obstante, nuevas imágenes del día de autos han revelado que no era la única imprudencia que estaba cometiendo Kiko Matamoros al volante. En un caluroso día de agosto en Madrid, el atuendo más cómodo es, sin duda, el que lucía Matamoros: camiseta, pantalón corto y chanclas. Pero para conducir puede resultar peligroso, concretamente por el calzado. Y es que, aunque el reglamento no prohíbe específicamente las chanclas, Kiko podría ser multado con hasta 200 euros por un agente que considere que este calzado puede interferir en el control del vehículo.
Esta no es una cuestión baladí. Cabe recordar que la famosa empresaria nocturna afincada en Marbella Olivia Valère acabó atropellando a un cliente de la gasolinera donde repostaba al quedársele enganchado en el pedal una tira de las sandalias con las que conducía.
Por tanto, no es tanto la multa el castigo al que se podría haber enfrentado Kiko Matamoros, sino a las consecuencias que tener un accidente conduciendo con chanclas y con la ITV caducada habría podido tener. Mejor no jugar con fuego.