El tie-dye y la tendencia patchwork preparan una primavera llena de luz

Quedan todavía algunas semanas para que comience la primavera pero en los escaparates y en las páginas webs de diferentes firmas ya se perciben las ganas de buen tiempo. Las cuentas de las influencers también son un adelanto claro de lo que está por venir y si hay algo que ha quedado claro en las últimas semanas es que, después de un complicado invierno marcado por el frío y la nieve, tenemos más ganas que nunca de sol, buen tiempo y, sobre todo, de pasar tiempo en el exterior -siempre que sea posible claro-.

Una de las tendencias que viene con fuerza es el denominado print tie-dye. Este estampado, al igual que los lunares, las rayas, los cuadros o el animal, nunca pasa de moda, pero ahora vuelve con más fuerza que nunca. Ya se convirtió en tendencia el pasado verano, pero parece que esta primavera va a arrasar en los armarios de todas las fashionistas, pero también para los chicos que quieren darle una vuelta a su vestuario.

El tie-dye o desteñido se puso de moda en los años sesenta, cuando lo lucieron algunas figuras destacadas como Janis Joplin, pero volvió con fuerza en la década de los noventa en una de sus formas más básicas: las camisetas multicolor. Ahora es momento de darle una nueva oportunidad a este básico que se caracteriza por su aire juvenil y que conquista los looks más comfy, pero también es apropiado para darle un toque diferente a tus estilismos más femeninos en forma de vestidos veraniegos o faldas.

A pesar de que se ha convertido en uno de los estampados protagonistas de muchas colecciones, lo cierto es que resulta muy fácil hacer una versión casera de estos looks. Tanto es así, que durante la cuarentena, uno de los retos virales de la red TikTok fue diseñar tus propios vaqueros tie-dye, para lo que existen numerosos tutoriales en YouTube.

No solo el tie-dye es tendencia de cara a los próximos meses, sino que si hay una cosa que queda clara de las nuevas propuestas de diferentes firmas es que la paleta de colores se desvía hacia los tonos pastel. Rosas, azules, amarillos y verdes en su versión más dulce, perfecta para los días de primavera y verano, que aportan un toque de luz a cualquier estilismo. En línea con esta idea, arrasan las prendas de patchwork, con mezcla de tejidos o de colores en un mismo tejido. La clásica camisa masculina de rayas con un twist, esto es, con varios colores en cada una de sus partes, por ejemplo, mangas, bolsillos, puños… Una prenda que se inspira en un diseño original de Ralph Lauren, y que arrasó el pasado verano entre las influencers.

Al margen de esta revolución en términos de gamas cromáticas, si hay algo que está claro de las últimas colecciones de las grandes firmas low cost es que impera la tendencia comfy, pero que vuelve con fuerza la minifalda, que se impone al monopolio que ha copado en los últimos años la falda midi en todas sus versiones, que se asocia con la elegancia y la sofisticación.