Melania Trump desafía a las supersticiones de Buckingham
La primera dama de Estados Unidos ha llamado la atención por su apuesta estilística durante su encuentro con el príncipe Carlos y Camila Parker en Clarence House
Melania Trump ha vuelto a Londres junto a su marido, Donal Trump. En esta ocasión, con motivo del 70 aniversario de la OTAN. La tarde de este martes, el presidente de Estados Unidos y la primera dama han tenido un encuentro con el príncipe Carlos y Camilla Parker Bowles en Clarence House. Para esta ocasión la exmodelo de origen esloveno ha elegido un estilo marcado por los colores vivos. Así, ha hecho un guiño a la reina Isabel II, quien suele apostar por estos llamativos tonos para que se le pueda ver entre la multitud.
La primera dama norteamericana ha lucido un impresionante abrigo amarillo de Valentino, valorado en 7.200 euros. Debajo de este se adivinaba un vestido color morado que combinaba a la perfección con sus salones de tacón de fino. Sin duda, una apuesta estilística que ha desafiado todas las supersticiones. Y es que para muchos, el amarillo trae ‘mala suerte’.
El matrimonio Trump con el príncipe Carlos y Camila Parker / Gtres
El matrimonio Trump, que estará tres días en la capital británica, también ha sido recibido por la reina Isabel. No obstantes, muchos de los miembros de la familia real no han podido darle la bienvenida a Melania y al mandatario estadounidense. Y es que el príncipe Guillermo se encuentra de gira internacional por Oriente Medio, mientras que los Duques de Sussex están disfrutando de un período de descanso en una locación que, de momento sigue siendo una incógnita. A quien sí podrán ver es a Kate Middleton, que viajó en coche hasta Buckhingham Palace.
Melania Trump, atrevida y excéntrica
Melania Trump ha apostado por este llamativo y atrevido look -teniendo en cuenta que ha asistido a una gala sino a una recepción- días después de mostrar la excéntrica decoración de Navidad de la Casa Blanca. Una festividad que, además, comenzó con un polémico outfit. Y es que la primera dama de Estados Unidos recibía hace poco el árbol de Navidad con un abrigo firmado por Dolce & Gabbana, que recordaba a la controversial prenda que utilizó hace dos años en un viaje a Sicilia, cuyo valor rondaba los 45.000 euros.