La reina Isabel gana una nueva partida al príncipe Carlos
A pesar de las complicadas circunstancias de los últimos meses, la monarca ha sabido reinventarse con mayor éxito para adaptar su agenda a la nueva situación.
A sus 72 años, el príncipe Carlos se ha convertido en el eterno aspirante al trono inglés ante una soberana que con casi 95 resulta incombustible. El príncipe de Gales lleva varias décadas a la espera para suceder a su madre, pero la energía y el compromiso de la reina Isabel con la Institución son tan firmes que no tiene intención de ceder paso a las nuevas generaciones hasta que no le quede otro remedio, esto es, a su muerte. Se ha hablado mucho de que en los últimos tiempos, dada la complicada situación generada por la crisis sanitaria, la Reina podría pensar en dar un paso atrás y ceder ciertas prerrogativas a su heredero, pero a pesar de todo, Isabel II se ha mantenido muy activa durante todo el confinamiento, cumpliendo de manera virtual con muchos compromiso y adaptando su agenda a la nueva realidad.
De hecho, según una reciente estadística, la reina Isabel ha desarrollado casi la mitad de sus compromisos oficiales de este año de manera virtual, ya sea a través del teléfono o mediante videollamada. De un total de 115 compromisos, la soberana ha llevado a cabo 56 sin salir del castillo de Windsor, el lugar que ha escogido para cumplir con las medidas de confinamiento decretadas por el Gobierno. Una actitud que deja clara la capacidad de la monarca para adaptarse a los nuevos tiempos y a las nuevas tecnologías.
Frente a la Reina, su heredero directo, el príncipe Carlos ha participado en 227 eventos a lo largo de 2020 y 70 de ellos los ha cumplido en remoto. Si bien es cierto que a todos los efectos son más que los que ha llevado a cabo la Reina, la realidad es que el príncipe Carlos ha cubierto más actos de manera presencial que virtual, lo que supone un cierto retraso frente a la nueva estrategia a la que ha obligado la crisis. No hay que dejar de lado que tanto el Príncipe como la Reina pertenecen a los colectivos de mayor riesgo frente al coronavirus, pero mientras que Carlos fue uno de los primeros en contagiarse y superarlo con éxito, la Reina está a la espera de poder vacunarse. Esta podría ser una de las razones por las cuales el heredero ha preferido mantener algunos de sus actos de manera presencial, lo que garantiza una mayor cercanía con los ciudadanos. Sin duda una ventaja de cara a afianzar vínculos para el futuro.
Frente al príncipe Carlos y la reina Isabel, los otros grandes protagonistas en términos de agenda han sido los duques de Cambridge. Kate y Guillermo -quien por cierto se contagió pero prefirió mantenerlo en secreto dado que su padre también estaba afectado y no quería alarmar a la población- han llevado a cabo muchos de sus actos de manera virtual y han sido unos de los más activos durante la pandemia.
La duquesa de Cambridge ha participado en un total de 133 compromisos este año, 50 de los cuales se han realizado de manera remota, menos incluso que la reina Isabel. El príncipe Guillermo, a quienes ya muchos ven como el sucesor natural de la soberana, ha cumplido con 188 compromisos y de esa cifra, 92 se han llevado a cabo en remoto, de manera que del núcleo principal de la Familia Real es quien más se ha tomado en serio lo de adaptarse a esta nueva realidad impuesta por la pandemia.
Al margen del núcleo central de “La Firma”, una vez más, la princesa Ana vuelve a ser una de las royals más trabajadoras, en estrecha competición con el príncipe Carlos. La hija de la reina Isabel ha cumplido con 207 compromisos a lo largo del año y 95 de sus apariciones se han producido de manera virtual. No ha superado en número al príncipe de Gales -otros años sí-, pero sí que ha demostrado su capacidad de adaptación a los nuevos tiempos. De hecho, incluso protagonizó una divertida anécdota durante una videollamada en la que también estuvo presente la reina Isabel.