De la reina Isabel a Carlos de Inglaterra: royals que han sufrido atentados

El pasado sábado, 13 de julio, Donald Trump sufrió un atentado durante un mitin en Butler (Pensilvania). El que fuera presidente de Estados Unidos llevaba tan solo unos minutos hablando cuando, de repente, se escucharon unos disparos. En ese preciso instante se llevó la mano derecha a la cara. De manera inmediata se fue a suelo y fue cubierto por los agentes del servicio secreto. Una vez se incorporó se pudo ver cómo la bala había impactado en la parte superior de su oreja derecha, visiblemente ensangrentada por la herida. El político fue trasladado al hospital más cercano del que salió con heridas leves.

Este no es el único caso de rostro conocido que ha sufrido un intento de asesinato. Si echamos la vista atrás e indagamos en la historia descubrimos que la reina Isabel también vivió una situación similar.

El intento de asesinato de la reina Isabel

Han pasado más de cincuenta años desde que Isabel II, fallecida el 8 de septiembre de 2022, estuvo a punto de ser asesinada en Australia. Nos remontamos al día 29 de abril de 1970, cuando la soberana y su marido, el príncipe Felipe de Edimburgo, viajaban en un tren desde Sidney a Orange para hacer un viaje de Estado. A mitad del trayecto el tren empezó a aminorar la marcha de forma considerable, lo que llamó la atención de todos. De hecho, llegó incluso a detenerse, pero ¿qué ocurrió realmente?

El tronco se dispuso en un paso de montaña en el estado de Nueva Gales del Sur. Los conductores pudieron mantenerse en la vía, sin embargo, no lograron evitar que el tren se deslizara un total de 215 metros antes de detenerse por completo. «Si el tren hubiera alcanzado su velocidad normal, se habría desviado de las vías hacia un terraplén. Mis investigaciones mostraron que el tronco se colocó deliberadamente en las vías», dijo Cliff McHardy, un policía retirado al Daily Mail.

Carlos III

En 1983, el actual rey de Inglaterra y la princesa Diana escaparon de un intento de asesinato. Cuando IRA se enteró de que el entonces príncipe Carlos y su esposa asistían a un concierto del grupo Duran Duran , escondieron una bomba en la pared de un baño.

Afortunadamente no detonó. En el caso de que sí hubiera explotado habría provocado daños irreversibles en un radio de 18 metros. Este suceso se pudo evitar gracias a que un policía se había infiltrado en el IRA y descubrió, previamente, el ataque planeado. Este no es el único intento de asesinato, dado que en 1994 durante una gira en Australia, el monarca estuvo a punto de ser asesinado por un hombre que se encontraba en el mismo recinto.

Amalia de Holanda

Por otro lado, en septiembre de 2022, se conoció que Amalia de Holanda había recibido amenazas, por lo que se vio obligada a regresar por amagos de secuestro. Recordar que, por aquel entonces se encontraba viviendo en Ámsterdam, donde inició sus estudios universitarios.

Los medios holandeses se hicieron eco de las amenazas que estaba sufriendo. Tras lo ocurrido, los reyes Guillermo y Máxima confirmaron las sospechas. Tras una visita de Estado a Suecia, los monarcas realizaron una rueda de prensa en la que esclarecieron la situación actual de su hija.

La Princesa Amalia estuvo recluida en Palacio debido a las continuas amenazas que podrían poner en peligro su integridad física. Unas amenazas que tuvieron «enormes consecuencias» para la joven, que se vio obligada a regresar a la residencia familiar en el Palacio Huis ten Bosch. «Esas consecuencias son muy difíciles para ella. No hay vida estudiantil para ella como la que tienen otros estudiantes. Estoy muy orgullosa de ella y de cómo sigue adelante», explicó Máxima.

Según informó por aquel entonces el Daily Mail, los presuntos delincuentes podrían pertenecer a la Mocro Maffia, un grupo delictivo que basa sus negocios ilegales en el tráfico de drogas. Se trata de una mafia con origen marroquí, asentada en los Países Bajos y en Bélgica, y a la que también se le atribuyen delitos de asesinato, secuestros y torturas.