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Fue la gran ausente del bautizo de Louis de Cambridge pero no ha faltado a la celebración del centenario de la RAF. La reina Isabel ha despejado los rumores sobre su estado de salud y ha reaparecido con una gran sonrisa en la abadía de Westminster, donde se la ofrecido una misa conmemorativa por los cien años de la fuerza aérea. Un acto en el que la monarca no ha estado acompañada por su marido, que lleva retirado de la vida pública casi un año.
Al servicio han asistido el príncipe de Gales y su esposa, la duquesa de Cornualles, así como los duques de Cambridge y los duques de Sussex , que esta tarde inician su primer viaje oficial de carácter internacional. La gran sorpresa de la jornada ha sido la presencia de Kate Middleton, quien aunque se encuentra de baja maternal hasta el mes de octubre, participa en algunos actos oficiales.
Las protagonistas de la jornada han vuelto a ser Meghan Markle y Kate Middleton. Mientras que la duquesa de Cambridge ha confiado en su firma de cabecera, McQueen y ha vuelto a lucir uno de sus ya míticos vestidos-abrigos en color verde menta, Meghan ha sorprendido con un outfit al más puro estilo new look. Se trata de un LBD de corte lady, escote barco -habitual en ella- y falda evasée de la firma Dior, lo que supone una nueva incorporación en su armario. La esposa de Harry ha completado su estilismo con tocado de Stephen Jones y los pendientes de Cartier que lució en su boda. Ambas mujeres se han calzado stilettos en tono nude.
Al acto también han asistido los condes de Wessex, los duques de Kent y personalidades de la vida política como la primera ministra Theresa May.