Las redes ‘matan’ a la reina Isabel en medio del escándalo
La monarca ha sido víctima de una conspiración en Internet sobre su muerte después del retiro de la vida pública del príncipe Andrés
Un relato anónimo puso en alerta roja al mundo entero el pasado domingo por la mañana. Se trataba de una información en el que ‘Gibbo’, una supuesta fuente militar, afirmaba por WhatsApp del fallecimiento de la reina Isabel , tras un ataque al corazón. A medida que pasaban las horas el alboroto era mayor, diversos medios de comunicación empezaron a hacerse eco de la falsa noticia y miles de personas inundaron las redes sociales con el rumor.
La reina Isabel en una imagen de archivo / Gtres
Gracias a uno de los expertos en la Familia Real Británica, Charlie Proctor, se ha podido poner freno a esta nueva ‘crisis’ institucional: «Veo que hemos llegado a esa época del año en la que tengo que disipar los rumores de la muerte de su Majestad. La Reina no está muerta. Está bien, viva y ansiosa por recibir al presidente Trump y otros líderes mundiales en el Palacio de Buckingham el martes para la recepción de la OTAN», dijo en especialista.
Sin embargo, resulta cuanto menos curioso que la red ‘mate’ a la reina Isabel en uno de los momentos más delicados para la Corona, cuando suenan con fuerza los rumores de una posible regencia del príncipe Carlos. Hace poco más de una semana el palacio de Buckingham confirmaba la dimisión del príncipe Andrés por su relación con el caso de Jeffrey Epstein, fallecido en agosto en la cárcel de Nueva York donde cumplía condena. A esto hay que sumar las continuas críticas que reciben los Sussex por su esquivo comportamiento.
La Reina y el príncipe Andrés en una imagen de archivo / Gtres
Está claro que no corren buenos tiempos para la Corona y que quizás haya llegado la hora de un cambio profundo. Una transformación que muchos solo ven posible en caso de muerte de la monarca. Quizás por eso las redes se hayan adelantado con una broma de muy mal gusto. Menos mal que si hay algo que le sobra a Su Majestad es, precisamente, el sentido del humor.