El motivo de la inesperada desaparición de la Reina
Hace casi una semana que doña Letizia no tiene ningún acto oficial desde que participara el pasado jueves en la entrega de los Premios Nacionales del Deporte.
Doña Letizia está ‘missing’. Hace casi siete días que la Reina no aparece en público y no se la espera hasta este jueves, cuando retome su agenda oficial con una reunión con la junta directiva de FEDER. Son solo dos los actos que la consorte tiene esta semana y coinciden justo con el jueves y el viernes, lo que le ha permitido tener libre desde el pasado jueves, cuando cerró su actividad de la anterior semana en la entrega de los Premios Nacionales del Deporte. Casi una semana extra de vacaciones en la que la esposa de Felipe VI ha estado alejada del ojo público.
Pese a que el no tener actos con cobertura informativa no significa que doña Letizia no se encuentre trabajando en otras cuestiones, esta semana es especial para la Reina. Su abuela, Menchu Álvarez del Valle celebra hoy su 91 cumpleaños. No es ningún secreto que la consorte mantiene desde siempre una relación muy estrecha con ella, de hecho, heredó de Menchu su pasión por el Periodismo -era locutora de Radio Oviedo- y fue a ella a una de las primeras a quien le presentó a don Felipe. A esto hay que sumarle que su abuela fue una de las pocas que estuvo presente en los actos con motivo de los Centenarios de Covadonga, que supusieron el debut de la princesa de Asturias, mientras que ningún miembro de los Borbones acudió.
Sin embargo, la veterana periodista no pasa por su mejor momento. Tal como publicaban algunos medios, Menchu se encuentra delicada de salud, lo que ha provocado que las visitas de su nieta se intensifiquen desde el pasado verano. A veces sola y otras en compañía de don Felipe y de sus hijas, doña Letizia aprovecha siempre que puede para estar con su abuela y esta ocasión tan especial no podía ser una excepción. De hecho, la propia Menchu ha reconocido varias veces que las visitas de doña Letizia son mucho más abundantes de lo que trasciende, ya que a la Reina le gusta mantener la discreción. Por todas estas razones, no es extraño que la consorte haya querido despejar su agenda para dedicarle un tiempo a su abuela y poder pasar con ella uno de sus días más importantes.