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'SÍ, QUIERO'

Marta Luisa de Noruega y el chamán: entre polémicas y amor en la cuenta atrás para su boda

La princesa y el chamán se casan el próximo 31 de agosto

La pareja se ha mantenido unida a pesar de las críticas y polémicas

  • Andrea Mori
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Marta Luisa de Noruega y el chamán Durek Verret están a escasas tres semanas de convertirse en marido y mujer. La hija mayor de los reyes Harald y Sonia de Noruega le dará el ‘sí, quiero’ a su prometido a finales del mes de agosto en un entorno idílico y en una celebración en la que no será un acto institucional, sino privado. Una boda de varios días que la pareja espera con ilusión, a pesar de las polémicas que han rodeado su historia de amor desde el principio. No obstante, pese a todo, la princesa y el chamán siempre han hecho oídos sordos a las críticas, incluso cuando han procedido de los más cercanos, como es el caso de la madre de Durek Verret.

En estos momentos, la pareja está inmersa en los preparativos de la boda, pero, poco a poco, se han ido conociendo algunos detalles sobre cómo va a ser la celebración. Hace unos días, en unas declaraciones en un podcast presentado por la princesa, el propio Durek Verret volvió a recalcar su amor por la hija mayor de los reyes Harald y Sonia y comentó que supo desde el principio que ella era su alma gemela y que quería pasar el resto de su vida a su lado.

Las polémicas de la pareja

Aunque el futuro matrimonio se aferra a su amor, lo cierto es que han sido varias las polémicas que han sacudido a la pareja de manera directa o indirecta. La más reciente, el escándalo que afecta al hijo mayor de la princesa Mette Marit y que aún está por resolver, por lo que es poco probable que Marius esté en la boda. Otro de los frentes tiene que ver con la madre del chamán, que ha acusado a Durek Verret de ser un estafador y, como tal, tampoco está invitada al enlace.

Marta Luisa de Noruega, con el chamán. (Foto: Gtres)

Además, hace algunas semanas, la hermana de Haakon y su prometido estuvieron en el punto de mira después de que la princesa utilizara su monograma y su título de princesa para promocionar una ginebra que se servirá en la boda, después de que ella misma hubiera renunciado a usar su título. Esto sentó muy mal a la opinión pública, sobre todo, porque en Noruega el alcoholismo es un problema grave. Marta Luisa se disculpó y aseguró que se trataba de un error por parte de la destiladora. No era la primera vez que la princesa recibía críticas por lucrarse de su posición privilegiada.

Una boda de varios días

Como no se trata de una boda royal al uso, no existe ni una lista de invitados confirmada, ni tampoco un programa de actividades público de cara al evento. Eso sí, en las últimas semanas se han ido conociendo algunos detalles de cara al enlace, que tendrá lugar en la zona de Gerainger, un fiordo declarado patrimonio de la UNESCO.

Tal como ha trascendido, los invitados llegarán el 29 de agosto, cuando se celebrará una fiesta de bienvenida que tiene por objetivo que puedan conocerse y socializar. Será una fiesta de estilo bohemio, relajada e informal, a la que se espera que asista el círculo íntimo de la princesa y su prometido.

El segundo día habrá una excursión en barco para que los invitados puedan ver algunas de las maravillas de la costa y visitar la cascada de las Siete Hermanas. Después del paseo, tendrá lugar una pequeña fiesta con cena y baile.

El día 31, sábado, se celebrará el enlace, que será mucho menos multitudinario que la boda de la princesa con su primer marido, Ari Behn. No obstante, se espera la presencia de algunos rostros conocidos del panorama internacional, así como de los familiares de la princesa. El colofón será el día 1, con un brunch con el que la pareja se despedirá de los invitados tras cuatro días de celebración inolvidable.

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