La madre de Kate Middleton, ¿una jefa tirana?
Varios exempleados de Carole Middleton se han quejado a los medios del presunto trato inadecuado que recibieron durante el tiempo que trabajaron en la tienda.
Los Middleton están en el punto de mira, y no precisamente por un motivo halagüeño. La madre de la duquesa de Cambridge acaba de ser acusada por varios de sus exempleados de no ser una ‘buena jefa’. Así lo acaba de publicar el pasado fin de semana el tabloide británico Daily Mail.
Al parecer, la suegra del príncipe Guillermo no ha sido muy amable con sus trabajadores, quienes se quejan, entre otras cosas, de sus continuos emails -hasta 70 en un día- o de su manía de chasquear los dedos para llamar su atención en lugar de llamarles por su nombre. Por si esto no resulta suficiente, la consuegra de Carlos de Inglaterra no lleva muy bien el que alguien esté en desacuerdo con ella y no teme tomar represalias al respecto tales como aumentar las jornadas de trabajo a los fines de semana u omitir información relevante al empleo. Un comportamiento que nada tiene que ver con el del padre de Kate Middleton, para quien los extrabajadores de la empresa solo tienen buenas palabras.
Carole Middleton es, junto a su marido, dueña de la empresa Party Pieces, que fundaron en 1987. Se trata de una tienda especializada en productos para cumpleaños y fiestas en la que, en un primer momento también trabajaron sus tres hijos. Una empresa que ha crecido de manera tan exponencial que les permite mantener un estilo de vida lo suficientemente desahogado como para costearse unas vacaciones en la exclusiva isla de Mustique, o su mansión en Berkshire. Aún así, para ellos continúa siendo una empresa familiar, una idea que parece no han llegado a transmitir a algunos de sus empleados a tenor de los últimos acontecimientos.
No es la primera vez que los padres de Kate Middleton tienen problemas con relacionados con su empresa. En 2013, tras el nacimiento del príncipe George, pusieron varios productos relacionados con el feliz acontecimiento y entonces se les acusó de aprovecharse de su relación con la Familia Real para enriquecerse. Pese a todo, la compañía, valorada en aproximadamente 35 millones de euros, no pasa por su mejor momento. De hecho, hace no mucho, varios medios publicaban que los Middleton se habían visto forzados a reducir la plantilla por problemas financieros. [LEER MÁS: EXCLUSIVA | La esteticista de Rosalía nos cuenta el secreto inconfesable de sus uñas: precio e inconvenientes]