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Los príncipes de Gales están dando mucho de qué hablar en las últimas horas, especialmente Catalina Middleton. Si bien era justo ayer, miércoles 8 de marzo, cuando la esposa del príncipe Guillermo se vestía con el uniforme militar en su debut como coronel de la Guardia Inglesa, hoy la cuñada del príncipe Enrique ha vuelto a acaparar miradas durante su visita al centro musulmán Hayes, encargado de recaudar fondos para ayudar a los afectados por el terremoto de Turquía y de Siria.
Teniendo en cuenta que el enclave en cuestión está situado en Haya y que los anfitriones son musulmanes, Catalina ha querido mostrarles su máximo respeto al cubrir su melena con un velo en blanco y negro, dando así lugar a una imagen de sí misma que no se veía públicamente desde su viaje de Estado a Pakistán en octubre de 2019. Y es que, probablemente este velo fuera una adquisición de la princesa durante esa visita previa, sobre todo teniendo en cuenta que es de la famosa firma paquistaní Élan.
A lo largo de toda su visita al centro en cuestión, la nuera del rey Carlos ha hecho gala de su espontaneidad y de su naturalidad a la hora de entablar conversación con algunos de los allí presentes, los cuales tienen previsto donar nada más y nada menso que 25 mil libras, de las cuales 17 mil se obtuvieron únicamente en el primer día de campaña. Una gran iniciativa que ha contado con el beneplácito de los príncipes de Gales, que se han mostrado visiblemente interesados por todas las historias que iban contando los trabajadores humanitarios que acababan de regresar de su cruda andadura por las zonas más afectadas de Turquía.
En esta última ocasión, y dejando entrever que goza de un exquisito gusto estilístico, Catalina ha combinado el velo con un vestido negro plisado de su firma de cabecera: Alexander McQueen. Un excepcional diseño que rescataba de su armario después de haberlo usado en septiembre, durante un acto en homenaje a la fallecida Reina Isabel. Además, para paliar las bajas temperaturas, Middleton se ha decantado por un abrigo largo negro de Catherine Walker, una de las diseñadoras favoritas de Lady Di. Unas elecciones que la princesa ha combinado con un bolso de piel de Grace Han y unos salones de ante de Gianvito Rossi.
Por si fuera poco, en este acto Catalina ha vivido una situación incómoda de la misma manera que tuvo que vivirla la Reina Letizia hace tan solo unas semanas. Esta ha ocurrido cuando uno de los organizadores ha saludado al príncipe Guillermo con la mano y su esposa también ha alargado su brazo para hacer lo propio, mientras que éste la ha retirado y se la ha llevado al corazón. Un gesto un tanto extraño dentro de nuestras costumbres y que, sin embargo, no parece haber molestado en absoluto a Catalina, que probablemente minutos después se ha percatado de que se trata de algo meramente cultural.