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Kate le planta cara al ISIS con su mejor sonrisa

La duquesa de Cambridge ha sido la última de los miembros de la Familia Real en convertirse en objetivo del ISIS

  • Andrea Mori
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Pase lo que pase, no pierdas la sonrisa. Esta parece ser la máxima de Kate Middleton. La duquesa de Cambridge ha retomado su agenda oficial con una entrañable visita al Jardín Botánico Rey Enrique, donde ha conocido de primera mano los nuevos proyectos y actividades del centro y ha compartido tiernos momentos con algunos de los afortunados niños que han podido disfrutar de la presencia de la esposa del príncipe Guillermo. 

Kate Middleton a su llegada / Gtres

La madre de George, Charlotte y Louis prefiere hacer oídos sordos a las últimas informaciones publicadas por varios medios británicos, que apuntan a que podría encontrarse en el punto de mira del ISIS. Al parecer, se han localizado varias amenazas hacia Middleton en la aplicación de mensajería instantánea Telegram. Por ejemplo, una imagen de la Duquesa de compras en un centro comercial, tachada con una ‘X’ en rojo y con la leyenda : «Sabemos lo que come, ahora hay que envenenarlo».

Kate Middleton / Gtres

Pese a que la nuera del príncipe Carlos se muestra tranquila, fuentes cercanas al Palacio de Kensignton sostienen que las amenazas se están considerando «muy en serio» y se han tomado medidas al respecto para evitar cualquier tipo de riesgo.

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Aunque los servicios de inteligencia británicos consideran que no tiene relación con el caso de la duquesa de Cambridge, el pasado mes de julio el terrorista Husnain Rashid fue condenado a cadena perpetua – al menos 25 años- por sus amenazas al príncipe George a través precisamente de la misma aplicación. El propio Rashid admitió los cargos de los que se le acusaban y aunque el objetivo principal era el primogénito de los Duques, se apuntaban otros potenciales entre los miembros de los Windsor.

Duquesa en verde

Para esta visita, la esposa del príncipe Guillermo se ha decantado por un aparentemente sencillo en tonos verdes. Kate ha estrenado una chaqueta de tweed de la firma Dubarry, cuyo precio inicial era de 400 euros, aunque ahora está disponible por 279. La ha combinado con pantalones cargo de Zara y botines con cordones Mozart de See By Chloé.

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