Jacques y Gabriela: la simbiosis perfecta para el futuro de Mónaco

Los príncipes Jacques y Gabriela de Mónaco cumplen ocho años y esta vez sí que podrán disfrutar de una fiesta en familia, sin restricciones ni inconvenientes. Atrás han quedado años marcados por la pandemia pero, sobre todo, la etapa en la que tuvieron que estar alejados de su madre, la princesa Charlene, que pasó muchos meses en Sudáfrica sin poder volver a casa a consecuencia de las complicaciones de una infección. Este año, por fin, las cosas van a ser diferentes.

A la espera de que desde el Palacio Grimaldi pueda dar algún tipo de información sobre el cumpleaños de los mellizos -lo cual es poco probable ya que no es muy habitual-, lo cierto es que sí cabe la posibilidad de que su madre comparta a través de las redes sociales alguna imagen de la celebración familiar, o quizás alguna fotografía inédita para felicitar a los pequeños.

Aunque todavía no han cumplido siquiera una década de vida, Jacques y Gabriella ya tienen un papel importante en el Principado. Durante el tiempo en el que la princesa Charlene estuvo ausente, los hijos menores del soberano fueron, junto a sus hermanas, la princesa Estefanía y la princesa de Hannover, su mayor apoyo. De hecho, era habitual verles en algunos actos puntuales acompañando a su padre, en los que demostraron su gran madurez y su seriedad a pesar de su corta edad.

A pesar de que fue Gabriela la que nació en primer lugar, la Ley Monegasca da prioridad al varón sobre la mujer en lo que respecta a heredar el trono: «la Corona recaerá en los descendientes del príncipe reinante por orden de primogenitura, con preferencia del varón sobre la mujer, en el mismo grado de parentesco», reza el artículo 10. Sin embargo, en alguna ocasión, el propio príncipe Alberto ha declarado que, aunque el titular de la Corona sea Jacques, su deseo es que Gabriela también tenga un papel destacado en el futuro.

La relación entre ambos hermanos es muy estrecha y su carácter totalmente complementario. Mientras que Jacques es tímido y reservado, Gabriela es mucho más espontánea y extrovertida. En una reciente entrevista en el portal Monaco Matin, el soberano habló de la educación de los mellizos y de cómo, a pesar de las evidentes diferencias entre los dos por cuestiones relacionadas con el papel que tienen en la estructura de la Corona, los Príncipes reciben una educación idéntica: «por supuesto que Jacques debe ser entrenado y preparado gradualmente para sus futuras funciones. Pero Gabriela también tendrá un papel que desempeñar, deberá estar lo más experimentada posible para ayudar a su hermano», sentenció el soberano.

El príncipe Alberto insistió además en que la relación entre los hermanos es muy estrecha y que tanto él como la princesa Charlene esperan que pueda seguir siendo así en el futuro, porque sería algo muy positivo para el Principado: «ya son muy cercanos, muy cómplices. No hay que hacer demasiada diferenciación por el momento, vendrá en pequeños pasos», aseguró el Príncipe, que confía en que poco a poco sus hijos vayan tomando conciencia del importante papel que tendrán que desempeñar. Ahora solo les queda disfrutar de un cumpleaños especial en familia.