Isabel II: así fue el último año ‘agotador’ de la Reina
De las lágrimas de Meghan a una inoportuna araña: la lupa al funeral de la reina Isabel II
La Reina Isabel reaparece, dos meses después, para romper con la tradición británica
La reina Isabel II hace historia y cita al nuevo Primer Ministro en Balmoral
Muere la Reina Isabel II: así será su funeral
El pasado 8 de septiembre, la soberana más longeva de la historia fallecía en la soledad de Balmoral. Un triste adiós a Isabel II, considerada como la Reina que supo adaptarse a los tiempos. Una inesperada heredera al trono británico que consiguió ganarse el cariño de la sociedad en tiempo récord. Sin embargo, pese a siempre gozar de un buen estado de salud, este último año ha sido muy complicado para ella, aunque no al alcance de su Annus Horribilis.
Enero
El mes de enero comenzó con un duro varapalo para la monarca. Su hijo, el príncipe Andrés, fue acusado por Virginia Giuffre por presuntos abusos sexuales. La norteamericana aseguró que fue forzada para mantener relaciones sexuales con él cuando aún era menor de edad. Un entramado correspondiente a la red de tráfico humano del financiero y pederasta Jeffrey Epstein por el que Andrés de Inglaterra tuvo que rendir cuentas con la justicia para poder demostrar su inocencia.
Después de enfrentarse a la pérdida de Lady Farnham, su dama de honor y de alcoba, Isabel II se vio obligada a despojar de los títulos militares al duque de York. Tras el escándalo, la soberana emitió el siguiente comunicado: «Con la aprobación y el acuerdo de la Reina, las afiliaciones militares y los patrocinios reales del duque de York han sido devueltos a la Reina. El duque de York seguirá sin desempeñar ninguna función pública y defiende este caso como ciudadano particular”.
Febrero
El mes de febrero comenzó con un movimiento que hizo saltar todas las alarmas. En el marco de su Jubileo de Platino, la soberana tomó una decisión respecto a Camilla de Cornualles: “Es mi sincero deseo que, cuando llegue ese momento, Camilla sea conocida como Reina Consorte mientras continúa con su leal servicio”. Un deseo que dejó entrever que la salud de la soberana no era la más idílica.
Después de estar en contacto con Carlos de Inglaterra, la Casa Real anunció que Isabel II se había contagiado de Covid. Según el comunicado enviado por Palacio, la monarca tenía síntomas leves “similares a un resfriado”, aunque, sin duda, este fue el comienzo de un declive en su estado de salud.
Marzo
Aunque parecía que el Covid había sido leve para la soberana, apenas unos días después anunció su ausencia en uno de los días más esperados de su agenda: el Día de la Commonwealth. Tras esto, tuvo que hacer frente a uno de los momentos más complicados de su vida. Después de perder a su marido, Felipe de Edimburgo, la Abadía de Westminster acogió el servicio religioso de Acción de Gracias en su recuerdo. Una noticia que supuso un fuerte varapalo para toda la familia pero, sobre todo, para la monarca, para quien su marido había sido su gran apoyo durante más de siete décadas.
Abril
Dos años después de que los duques de Sussex rompieran lazos con la Familia Real británica, tuvieron una reunión secreta con la Reina Isabel. El matrimonio quiso aprovechar su viaje a Europa para hacer parada en Londres. Y es que, lo que impulsó a Enrique y a Meghan a reencontrarse con sus familiares fue el debilitado estado de salud de la Reina Isabel II. Días más tarde, la soberana celebró su 96 cumpleaños en uno de los momentos más delicados de su vida. Pues, aunque siempre ha presumido de una genética privilegiada y una salud bastante buena, en el último año experimentó un llamativo bajón. Una cuestión que algunas fuentes atribuyeron a la muerte del príncipe Felipe, que afectó fuertemente a la Reina.
Mayo
El mes de mayo comenzó siendo una incógnita, pues la agenda de Isabel II estaba parada por completo. Sin embargo, a mediados de mes, todo dio un giro de 180 grados. Fue el día 15 cuando reapareció en el Royal Windsor Horse Show, pues no quiso perderse la cita debido a su gran pasión por el mundo de la hípica. Desde ese día, y en la recta final para su Jubileo de Platino, la monarca intensificó sus compromisos. Por ejemplo, participó también en el Chelsea Flowe Show de Londres, una visita en la que se mostró muy sonriente y dio portazo a los rumores sobre su estado de salud.
Junio
Este mes estuvo marcado por el Jubileo de Platino de la Reina. Los festejos comenzaron con el tradicional Trooping the Colour en el que se celebró el cumpleaños de la monarca. Pero pronto llegó la preocupación. Tras presidir la celebración desde el balcón del Palacio de Buckingham, la Casa Real anunció que la soberana no estaría presente en el servicio religioso de la Catedral de San Pablo. Fuentes oficiales recalcaron que la monarca había «disfrutado mucho» de la primera celebración, pero que se encontraba cansada.
Después de varios días ausente por temas de salud, Isabel II reapareció para poner fin a los festejos por su Jubileo de Platino. De verde y con su inseparable bastón, la Reina clausuró desde el balcón de Buckingham las fiestas que celebraron sus siete décadas en el trono. El acto finalizó con uno de los momentos más emocionantes del Jubileo, la despedida al ritmo de God Save the Queen, el himno nacional. Tras esto, Isabel II se ha dirigió a todos los ciudadanos para pronunciar, aunque por escrito, las que, probablemente, fueron las palabras más sentidas de todo su reinado: «Cuando hablamos de cómo celebrar 70 años siendo vuestra Reina, no hay ningún manual (…) Aunque no he podido asistir a todos los eventos en persona, mi corazón estaba con todos vosotros; y sigo comprometida a serviros lo mejor que pueda, apoyada por mi familia”.
Julio
Tras un mes marcado por su ausencia, Isabel II retomó su agenda para estar presente en la ceremonia de entrega de la Cruz de Jorge VI a los jefes del NHS en Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda del Norte, así como a un trabajador de primera línea de cada uno. Un emotivo detalle con el que la monarca quiso distinguir al NHS por su labor en la pandemia.
Agosto
El mes de agosto tampoco fue fácil para la soberana. “Estoy aquí para matar a la Reina”, este era el objetivo de Jaswant Singh Chail, el joven de veinte años que fue interceptado la pasada Navidad en los terrenos del Castillo de Windsor armado con una ballesta. En un vídeo grabado desde el hospital psiquiátrico de alta seguridad de Broadmoor en Berkshire, el joven reveló lo que realmente pretendía cuando entró en Winsdor. Según trascendió, Jaswant Singh Chail llevaba una máscara y portaba una ballesta preparada para disparar. Él mismo confirmó al Tribunal de Westminster que quería matar a la monarca. Una acción por la que ha fue condenado por traición.
Además, este mes estuvo marcado por los 25 años del fallecimiento de Lady Di, un día marcado para siempre en la vida de la Corona británica. Pero terminó con un gran momento para Isabel II pues, aunque no atravesaba su mejor momento de salud, la soberana citó el 6 de septiembre a la nueva Primera Ministra británica en su casa de Balmoral. Y es que, aunque dicho encuentro se llevaba a cabo en el Palacio de Buckingham, a sus 96 años, la Reina madre tomó la determinación de que, para evitar más desplazamientos, se produjese este cambio de planes y localización en su ajetreada agenda.
Septiembre
Septiembre comenzó con la peor de las noticias. Después de un año de preocupación por el estado de salud de la soberana, finalmente falleció el 8 de septiembre. Poco después de las 19:30 (hora española), el Palacio de Buckingham emitió un comunicado para confirmar su muerte: “La Reina murió pacíficamente en Balmoral esta tarde. El Rey y la Reina Consorte permanecerán en Balmoral esta noche y volverán a Londres mañana”.
El 19 de septiembre, se celebró el funeral de Estado de la Reina en la Abadía de Westminster.