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No es ningún secreto la tensión existente entre los príncipes Guillermo y Enrique. Desde que el menor de ellos se trasladó en 2020 a vivir a Estados Unidos eximiendo cualquier tipo de responsabilidad real a su paso, nada es lo mismo entre ellos. En el pasado quedan aquellas estampas de complicidad y conexión que se forjaron, principalmente, por su madre, la princesa Diana, fallecida aquel 31 de agosto de 1997 en un trágico accidente en el Puente del Alma, en París, Francia.
Las relaciones familiares han cambiado dentro de la Institución, es una férrea realidad a la que se tiene que enfrentar día tras día la Corona británica, aunque intente colocar un sutil velo para evitar estar en el ojo del huracán. Ahora, ha trascendido que el heredero al trono echó al duque de Sussex de su casa real después de enterarse de un «expediente» de presunto acoso por Meghan Markle, según un libro.
El historiador Robert Lacey ha afirmado que una llamada telefónica furiosa entre los hermanos terminó con el príncipe Enrique colgando cuando se enfrentaron por las afirmaciones de que la duquesa de Sussex dejó al menos a un trabajador sufriendo trastorno de estrés postraumático (TEPT) debido al ambiente «tóxico». Como era de esperar, su esposo defendió a la actriz que formó parte del elenco de Suits.
Por su parte, los Sussex negaron las acusaciones de acoso, diciendo que Meghan fue víctima de una «campaña de desprestigio». Guillermo «se puso hecho una furia» cuando se enteró de las acusaciones, y más tarde dio instrucciones a su secretario privado, Simon Case, para empezar a dividir sus hogares «inmediatamente», ha afirmado el escritor.
En el libro de Lacey Battle of Brothers, publicado en 2021, un amigo afirmaba: «Guillermo echó a Enrique». El hermano menor, dice el ejemplar, estaba molesto porque Guillermo había considerado creíbles dichas afirmaciones. Según Lacey, el secretario de comunicación conjunto de los hermanos, Jason Knauf, había decidido hablar en nombre del personal tras escuchar las denuncias de malos tratos por parte de la duquesa de Sussex. Knauf elaboró un dossier con las denuncias, que envió al secretario privado del príncipe de Gales.
Guillermo, a quien «le gustaban personalmente» todos los miembros del personal que supuestamente habían sido maltratados por Meghan, llegó a creer que la ex actriz era «fundamentalmente hostil al sistema real», escribió Lacey. Afirmó que el heredero al trono consideraba al personal como «colegas a los que apreciar y de los que era responsable», lo que significa que estaba «horrorizado» por el contenido del dossier. El documento de 2018 -que Enrique y Meghan han refutado- afirmaba que la duquesa había intimidado a dos asistentes personales para que abandonaran sus puestos de trabajo el año anterior. También afirmaba que Meghan parecía decidida a «tener siempre a alguien en su punto de mira», y Knauf dijo que había recibido «informe tras informe» de personas que presenciaron «un comportamiento inaceptable» de Meghan hacia un miembro del personal.
Muy molesto, el príncipe Guillermo se enfrentó a su hermano. «Enrique apagó el teléfono enfadado, así que Guillermo fue a hablar con él personalmente. El príncipe estaba horrorizado por lo que le acababan de contar sobre el supuesto comportamiento de Meghan, y quería escuchar lo que Enrique tenía que decir». Al hijo menor del rey Carlos III le dolió que su hermano mayor creyera esas presuntas afirmaciones sobre Meghan, mientras que Guillermo no comprendía la situación, por lo que se sentía justificado por haber tenido dudas sobre su cuñada antes de que se casara con la familia.
Lacey indica que durante esta conversación, Enrique expresó su creencia de que alguien en el círculo real era «racista», pero el libro no dice a quién se refería. A pesar de haber convivido con su hermano menor en el palacio de Kensington durante una década, decidió que ya era suficiente y ordenó a su equipo que los separara. Como resultado, los duques de Sussex se trasladaron fuera de Londres, a un nuevo hogar en Windsor, antes de renunciar finalmente a los deberes reales por completo.