El duque de Edimburgo, hospitalizado en Londres
El marido de la reina Isabel II está bajo vigilancia médica después de sentir un malestar y por precaución.
Grave preocupación en el Reino Unido. El duque de Edimburgo, marido de la reina Isabel, permanece ingresado desde ayer por la noche en el hospital Rey Eduardo VII en Marylebone, Londres. Así lo han confirmado fuentes oficiales del palacio de Buckingham que aseguran que el príncipe Felipe fue trasladado a la capital desde el Castillo de Windor por consejo de su médico de confianza como medida de precaución cuando empezó a sentirse indispuesto.
Aunque por ahora no han trascendido más detalles sobre el estado del marido de la reina Isabel, sí que se ha confirmado que se encuentra estable y se espera que permanezca ingresado al menos unos días más en el centro hospitalario. Sí que se ha descartado que su malestar pueda tener relación con el coronavirus. De hecho, tanto la Reina como el consorte ya han recibido al menos una de las dosis de la vacuna de Pzfizer contra el virus y han permanecido en todo momento aislados en Windsor debido a que ambos pertenecen a los grupos de mayor riesgo de cara a la enfermedad por su avanzada edad.
Pese a que el ingreso del marido de la Reina ha generado una gran preocupación en todo Reino Unido, lo cierto es que no se ha tratado de un caso de extrema urgencia. Tanto es así que ha viajado desde el Castillo de Windsor a Londres para ingresar en su centro hospitalario de confianza. Un trayecto de cuarenta minutos que no estaría indicado en casos de extrema gravedad. No se esperan, en principio, visitas de ningún miembro de la Familia Real dadas las complicadas circunstancias actuales, pero todos ellos están informados en todo momento de la evolución del estado del príncipe Felipe. Fuentes cercanas al príncipe Felipe aseguran que se mantiene activo y de buen humor desde que ingresara.
No es la primera vez que el consorte es ingresado en este centro hospitalario como medida preventiva. Poco antes de las navidades de 2019, el príncipe Felipe también fue hospitalizado en la misma institución. En aquel momento se encendieron todas las alarmas sobre su estado pero, afortunadamente, el duque de Edimburgo pudo abandonar la clínica a tiempo para celebrar las fiestas en Sandringham con el resto de su familia.
A punto de cumplir los cien años, desde 2017, Felipe de Edimburgo se encuentra retirado de la vida institucional. Su ‘jubilación’ se produjo poco después de alcanzar los noventa y cinco, edad que la reina Isabel cumplirá en unos meses y que ha hecho pensar en la posibilidad de una abdicación. Aunque el duque de Edimburgo se ha opuesto a todo tipo de celebraciones, desde hace algunas semanas se ha estado planteando la idea de una gran conmemoración por el aniversario del consorte, al estilo de la que se celebró cuando la reina madre cumplió la misma edad. Sin embargo, por ahora, todos los posibles planes han quedado aparcados.
Una salud de hierro delicada
En los últimos años, el príncipe Felipe ha sufrido varias dolencias. En 2011 fue tratado de una arteria bloqueada en el Hospital Papworth en Cambridgeshire y una infección de vejiga en junio de 2012 le obligó a perderse las celebraciones del Jubileo de Diamante de la Reina. Más tarde, en 2013 fue intervenido del abdomen y en 2014 comenzó a utilizar audífonos por un problema de audición. En junio de 2016 se retiró de un evento por el aniversario de la Batalla de Jutlandia debido a una dolencia menor y poco después anunció su retirada definitiva de la vida institucional.