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Carlos III ya se ha coronado como monarca y lo ha hecho junto a la mujer de la que siempre ha estado enamorado. Algo insólito para muchos, que tiempo atrás, nunca pensaron que Camila Parker Bowles pudiera convertirse en reina. Sin embargo, así ha sido finalmente. Tras una espera de más de medio siglo, Carlos ha sucedido a su madre, la inolvidable Reina Isabel, y ha sido coronado en la Abadía de Westminster en una ceremonia cargada de simbolismo que ha dado comienzo, oficialmente, a una nueva era.
Junto al monarca, su segunda esposa, el gran amor de su vida, que a partir de ahora ha dejado de llevar el título de reina consorte para ser reina a secas. Un detalle con el que Carlos ha desafiado los deseos de su madre. Y es que en febrero de 2022, cuando se cumplían 70 años de la muerte del rey Jorge VI y de la subida al trono de Isabel II, la Reina emitió un comunicado en el que despejaba las dudas sobre el futuro de Camila. En aquel momento nadie sabía más allá del entorno cercano de la monarca que su final estaba cerca y, como era de esperar, Isabel II, una de las reinas que más ha hecho por la estabilidad de la monarquía en el Reino Unido, quería garantizar su estabilidad y alejar posibles polémicas.
No hay que olvidar que el recuerdo de Diana de Gales siempre ha estado muy presente, es más, la propia Camila evitó el título de princesa de Gales para no avivar las especulaciones y optó por el de duquesa de Cornualles. Precisamente por el complejo pasado entre el rey Carlos y su segunda esposa, desde hace varios años se había abierto el debate sobre el título que Camila debería llevar una vez muriera la Reina Isabel. Se hablaba de la posibilidad de que fuera princesa consorte, pero la realidad es que este tratamiento solo se da a los maridos de jefa de Estado, ya que las esposas siempre han sido reinas -aunque de facto fueran consortes-. No solo en Reino Unido, sino también en otros países. Famoso es, por ejemplo, el caso de Enrique de Dinamarca que, a lo largo de su vida se quejó constantemente de no tener un rango superior.
La Reina Isabel quiso zanjar los debates al hablar de Camila Parker Bowles como reina consorte. Un título que ha llevado hasta la coronación, cuando Carlos III ha decidido que sea reina, sin más. Una decisión que, aunque tiene sentido si echamos la vista atrás y lo comparamos con otros países, lo cierto es que ha levantado muchas ampollas.
Lo que no esperábamos es que se produjera una fuerte discusión entre la esposa del monarca y la que es, sin duda, una de las mujeres fundamentales en su vida, la princesa Ana. La hermana del Rey, que ocupa un cargo muy importante dentro de ‘La Firma’ es, quizás, la única persona de su entorno que no tiene reparos en decirle las cosas tal cual las piensa, aunque acate sus decisiones sin rechistar. Hace unos días fue ella misma la que criticó el deseo de Carlos de reducir la estructura de la monarquía, y alegó que era algo poco probable, ya que, en estos momentos, no son muchas las figuras que ejercen tareas de representación.
Más allá de esto, según ha revelado un diario británico, la Princesa tuvo un choque frontal con Camila por el tema del título. Tal como ha revelado David Emanuel -el diseñador del vestido de novia de Diana de Gales-, ahora mismo mucha tensión por el título de Camila, no solo porque no todos la aceptan como reina tal cual, sino porque, además contradice expresamente el deseo de la Reina Isabel.
En una conversación con Dan Wootton en GB News, Emanuel dijo que escuchó que había habido una cena en la que la Princesa le dijo a Camila que no era la reina, sino la reina consorte. Por el momento no ha trascendido cuál fue la respuesta de la esposa del monarca, aunque lo que queda claro es que Ana no tiene reparos en expresar lo que piensa, aun a riesgo de enfrentarse a su hermano.