La gran preocupación de Terelu Campos por su madre en un momento clave
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Terelu Campos ha abierto de par en par su corazón en el que ha sido su blog número 100. No son buenos momentos para la colaboradora de Telecinco, que está viendo cómo su madre, por momentos, se apaga. Y menos ahora, que llega la Semana Santa, una fecha marcada en rojo en el calendario del clan Campos. Ver a las hermanas y a la matriarca, María Teresa, disfrutar de las procesiones religiosas desde su balcón ubicado en la calle Larios era una de las tradiciones de la crónica social. Una estampa que este año no se va a volver a repetir.
«Mi única preocupación no solo es mi hija. Cuando el pilar de tu vida no pasa por el mejor momento, eso también te arrastra», ha confesado Terelu para Lecturas. La hermana de Carmen Borrego ha relatado que va a estar el Lunes Santo en Málaga para cumplir su promesa con el cristo El Cautivo, un viaje relámpago que va a vivir con mucha tristeza. «Para poder estar también el Domingo de Ramos con mi Virgen de la Salud. Nunca olvidaré lo mucho que me ha ayudado junto con las personas que conforman esa hermandad», ha sentenciado. Y es que, atrás han quedado aquella época en la que la Semana Santa era una festividad llena de alegría para el clan familiar. «Ya nada es igual ni volverá a serlo nunca».
Terelu Campos se ha sincerado como hacía tiempo para informar que su madre no la acompañará en esta ocasión como antaño: «Se me caen las lágrimas mientras escribo esto y me cuesta recuperar el aliento al saber que la persona más importante de mi vida no volverá a estar nunca más en su Semana Santa malagueña». Desde Navidad, María Teresa no atraviesa un buen momento de salud, pues tras una aparatosa caída, la presentadora de televisión ha dejado de comer e, incluso, de salir de casa. Ya no queda con sus amigas, ya no aparece en la pequeña pantalla y solo tiene ganas, muy de vez en cuando, de salir con Gustavo en coche. Las cosas ya no son lo que eran.
«Me rompe el corazón en mil pedazos, porque sé lo mucho que la ha disfrutado. Sé lo mucho que le ha gustado enseñársela al mundo entero, a sus amigos y hacer de anfitriona durante esos días. Aunque ella no esté, yo sí lo haré en su nombre. Rezaré a su Cautivo y él sabrá que ella está ahí», ha continuado explicando Terelu.
La complicada salud de María Teresa
Era el pasado mes de febrero cuando la revista Semana publicaba un reportaje sobre la presentadora en el que aseguraba que sus hijas habían tomado la decisión de buscar una cuidadora para su madre. María Teresa ya no es independiente y tanto Terelu como Carmen, aunque están con ella siempre que lo necesita, no pueden cuidarla las 24 horas del día. «Mi madre come poco y bebe poco, y nuestra obligación como hijas es tener un control de que todo esté bien», decía Terelu. Ahora, María Teresa se encuentra tranquila en la intimidad de su hogar, alejada del foco mediático y, probablemente, triste de no poder disfrutar la Semana Santa en familia como hicieron durante tantos años.