El motivo por el que el Rey Carlos lleva un cuchillo en el calcetín durante su visita a Escocia
Carlos III ha acudido en solitario a los Mey Highland Games, una cita ineludible del calendario de los escoceses
El Rey de Inglaterra se encuentra atravesando una etapa difícil marcada por su enfermedad y la mala relación con su hijo Harry

Este mismo sábado 2 de agosto, el Rey Carlos III de Inglaterra ha acudido en solitario a los Mey Highland Games. Unos juegos tradicionales escoceses que combinan competiciones deportivas, música, baile y cultura y que acoge cada año el pueblo John O’Groats Showground, en Caithness, al norte de la región. Por su arraigo cultural, es habitual que los asistentes vistan el traje regional del país. Como no podía ser de otra manera, Carlos III ha hecho lo propio y se ha vestido como sugiere la cita, pero ha llamado la atención un objeto que portaba dentro de uno de los calcetines: un sgian dubh.
Un puñal ceremonial que es frecuente colocar en esa zona de la vestimenta y que simplemente cumple una función estilística y ornamental, pese a que en los orígenes era un arma de defensa. Anteriormente, también se mantenía bajo el brazo y siempre con la empuñadura visible, para que, a la hora de recurrir a él, los portadores no encuentren ningún obstáculo.
Carlos III con el traje regional escocés. (Foto: Gtres)
Se trata de una pieza con una colocación específica, ya que, según la mano útil del portador, se sitúa en la derecha o en la izquierda, siendo siempre el lado correcto el contrario al dominante. Un detalle que vislumbra que el esposo de Reina Camila es zurdo, ya que, tal y como reflejan las imágenes, esconde el cuchillo en la pantorrilla derecha.


Carlos III con el traje regional escocés. (Foto: Gtres)
El resto de su estilismo estaba compuesto por los objetos que marca la norma. Chaqueta y chaleco con tejido marrón con rayas naranjas, camisa clara, corbata marino y burdeos y falda de tartán acompañada de un adorno en la zona del pubis denominado sporran, medias por debajo de la rodilla en color vino y zapatos negros de cordones. En todo momento estuvo acompañado de un scottish walking stick, o bastón escocés para andar, con el que aprovechó para facilitar sus movimientos. También ha lucido algunos galones sobre la solapa derecha de la blazer.
La enfermedad de Carlos III
El monarca no cesa su actividad institucional. Después de que los facultativos le detectaran un cáncer que le apartó momentáneamente de la primera línea y pese a que todavía se encuentra en periodo de recuperación, sigue muy comprometido con su labor al frente de la corona. Las informaciones que se han conocido acerca de esta dolencia son escuetas, ya que se ha cuidado mucho la imagen pública del regente y los aspectos relacionados con su lucha. Hace unos meses se sometió a un agrandamiento de próstata, con el fin de mejorar su situación.


Carlos III con el traje regional escocés. (Foto: Gtres)
En ocasiones, ha sido el propio Rey quien ha dado pistas en actos oficiales de su evolución y de como afronta esta condición que atraviesa. «Cada diagnóstico, cada nuevo caso, será una experiencia abrumadora y a veces aterradora para esos individuos y sus seres amados. Pero como alguien que forma parte de esas estadísticas, puedo dar fe de que también puede ser una experiencia que pone claramente de manifiesto lo mejor de la humanidad», reflexionó a principios de este año sobre su afección y poniéndose en la piel de las familias de los afectados durante un encuentro con cuidadores de enfermos. Precisamente durante el primer trimestre del año también fue ingresado por unas complicaciones tras sufrir efectos adversos derivados del tratamiento. Unos achaques de los que aparentemente se ha recuperado y por lo que ha podido continuar su vida con relativa normalidad. A pesar de estos beches de salud que ha sufrido, durante todo el evento se ha mantenido muy cercano y sonriente con los asistentes y el resto de autoridades presentes.