De Miguel Bosé a Dora Postigo pasando por Bimba: el mejor legado de Lucía Bosé es su familia
Su matrimonio con Luis Miguel Dominguín fue el engranaje perfecto para un árbol genealógico con unas fuertes raíces
“No creo en que las personas se vayan del todo. El físico desaparece, dejando un saco de mierda, pero el alma permanece”. Así veía la vida -y la muerte- Lucía Bosé. La actriz italiana ha dicho adiós a la vida terrenal dejando un patrimonio cultural y personal que sirve de herencia para las generaciones venideras. Su dilatado curriculum en el mundo del séptimo arte provocó que su nombre siempre estuviera vinculado a las personalidades más importantes de Italia y España.
Los focos han sido un elemento más en su vida queriendo huir de ellos en muchas ocasiones. Sin embargo, no solo nunca han dejado de apuntarla sino que ha conseguido que formen una estela para la dinastía de artistas que nacen de su existencia.
La actriz Lucía Bosé junto a sus hijos en una imagen de archivo/Gtres
Su matrimonio con Luis Miguel Dominguín fue el engranaje perfecto para un árbol genealógico con unas fuertes raíces. El diestro más deseado y la mujer más guapa del país se daban el sí quiero en el 1956. A partir de esa unión, todas las demás generaciones han hecho del arte su profesión. Transgresores, adelantados a la actualidad y con una visión del mundo muy particular. Así son los Bosé-Dominguín.
De aquel matrimonio nacieron sus tres hijos: Miguel, Lucía y Paola. Miguel Bosé escogió la música como profesión y supo adelantarse a una época. Uno de los artistas más reconocidos de nuestro país que además utilizó el apellido de su madre como nombre artístico.
La actriz Lucía Bosé junto a sus hijos en una imagen de archivo/Gtres
La belleza andrógina de Lucía Dominguin la llevó también al mundo de la interpretación. Emigró a Italia para más tarde contraer matrimonio con Alejandro Salvatore con quien tuvo a sus dos primeros hijos: Olfo Bosé y la desaparecida Bimba Bosé. Esta última fue precisamente fue la artífice de una de las señas de identidad más características de Lucía Bosé: su pelo azul. Fue la cantante quien le tiñó el pelo a su abuela y ella dejó que el eléctrico color formase parte de su vida.
De Bimba nace precisamente la, hasta ahora, última rama de artistas: Dora Postigo, la bisnieta de Lucía Bosé. La joven de tan solo 15 años ha heredado la singularidad, carisma y capacidad hipnótica de su madre. Sin embargo, este linaje no acaba aquí. Lucía Dominguín volvió a casarse en 1985 con el actor extremeño Carlos Tristancho con quien tuvo a otras dos hija: Jara y Lucía, más conocida como ‘Palito’. Ella precisamente desembarcó en el mundo de la pasarela hace tres años desfilando para Francis Montesinos. Ahora, ha conseguido hacerse hueco en este colosal universo despuntando como maniquí.
Por su parte, Paola Dominguín, la tercera hija de Lucía, estudió baile, mimo e interpretación. Aunque en un principio sí que participó en varias ficciones como la película ‘California’ o series como ‘Todos los hombres sois iguales’, finalmente se dedicó al mundo de la moda y a la creación de su propia empresa. Sin embargo, ella también ha dejado su propio legado. En 1988 tuvo a su primer hijo, Nicolás Coronado, fruto de su relación con José Coronado. Nicolás, otro nieto de Lucía Bosé, que también ha elegido la interpretación como forma de vida.
En definitiva, Lucía Bosé ha conseguido ser la reina de una saga de artistas que siempre la llevarán por bandera.